La importancia de la Alimentación para conservar la salud

Dr. Raúl Morales

Por: Dr. Raúl Morales

Estimados amigos, los hábitos alimenticios que heredamos de nuestros antepasados comúnmente han sido muy valiosos, ya que se aconsejaba la ingesta de productos frescos de origen natural, tales como las frutas, las verduras, las fibras, la leche de vaca comúnmente obtenida directamente de los establos, así como los huevos de gallina de rancho, lo que favorecía que nuestro organismo estuviera en mejores condiciones, y con esto prácticamente se evitaban muchas enfermedades.

Alimentos chatarra

En la actualidad en los llamados países industrializados, así como los países en vías de desarrollo, estos hábitos alimenticios han sido prácticamente sustituidos por alimentos o comidas llamadas “chatarra”, con lo que se ha favorecido la aparición de múltiples enfermedades por la ingesta en forma excesiva de determinados alimentos, y por supuesto por la carencia de algunos nutrientes en forma específica, originando con esto la aparición de alteraciones en prácticamente en todos los aparatos y sistemas de nuestro organismo, requiriendo del ingreso suplementario de vitaminas, ácidos grasos específicos, así como, minerales y otro tipo de suplementos.

Se han hecho estudios múltiples, de muchas enfermedades que han aparecido más frecuentemente en el presente siglo, tales como la obesidad, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes mellitus, así como bastantes enfermedades crónico regenerativas tales como la artritis o los padecimientos neuromusculares.

Los nutrientes presentes en los alimentos de origen natural, como son las vitaminas y los minerales, son constituyentes esenciales de las enzimas y de las coenzimas, de las moléculas que están diseñadas para reaccionar químicamente, y nuestro cuerpo funcione a la perfección, y para eso podemos poner un ejemplo; en el caso de la vitamina C que juega un papel preponderante para trabajar complementariamente con la enzima llamada Prolina Hidroxilasa en la síntesis del colágeno, lo que conlleva a una mayor propensión a las contusiones, así como tendencia al sangrado de las encías y a prologar el tiempo necesario de la cicatrización de las heridas.

Las dietas más ricas,  son a menudo las más pobres. Existen personas que con mucha frecuencia presentan estados de carencia leve y todo por falta de una buena orientación nutricional.

Las Vitaminas

Son moléculas especiales de carácter orgánico muy importantes para el buen desarrollo de nuestro organismo, su carencia puede manifestada en padecimiento del tipo de la pelagra y escorbuto, y todo por la carencia de Niacina y de Vitamina C,  y por su puesto también, la carencia de Tiamina que favorece la enfermedad llamada Beriberi.

Las vitaminas en general intervienen en muchas de las funciones de nuestro organismo, y su carencia provocará manifestaciones clínicas, por lo que el paciente regularmente requiere de una valoración médica.

División de las vitaminas

Las Vitaminas como tales se dividen en dos grandes grupos, dependiendo de su comportamiento respecto a las grasas, llamándoseles Liposolubles, así como su comportamiento con el Agua denominándoseles Hidrosolubles.

Las vitaminas Liposolubles; son aquellas que se almacenan en el tejido graso y en hígado, eliminándose escasamente por la orina. Las vitaminas Hidrosolubles; como la vitamina C y las vitaminas del complejo B, en caso de ingerirse en exceso, nuestro organismo las elimina fácilmente a través de la orina, el sudor y las heces fecales, comúnmente, estas vitaminas deben ingerirse diario, porque nuestro organismo solo es capaz de conservarlas durante un perdido de tiempo muy corto antes de ser eliminadas.

Los minerales

Son elementos químicos inorgánicos y que no contienen carbono, estos minerales se encuentran presentes tanto en los vegetales como en los productos de origen animal, son indispensables para el buen funcionamiento de nuestro organismo, y participan en forma coordinada con las Vitaminas para la elaboración de diferente clase de enzimas que van a actuar en diferentes procesos en nuestro organismo. Se ha demostrado que algunos de ellos poseen un fuerte efecto antioxidante.

Minerales mayores y minerales menores

Se les han denominado minerales Mayores o Macroelementos por que se requieren para nuestra vida diaria dosis superiores a los 100 miligramos, a ese género pertenecen el potasio, sodio, cloro, el magnesio, el azufre, el calcio y el fosforo principalmente. Cuando las necesidades de nuestro organismo de cifras menores a 100 miligramos, se les denomina minerales Menores u Oligoelementos y tal es el caso del cobre, del Yodo, del Hierro, del Manganeso, el Boro, el Molibdeno, el selenio, el silicio y otros más.

Para adquirir estos minerales, tanto los Macroelementos como los oligoelementos deben ingerirse principalmente en los vegetales, las plantas comúnmente absorben los minerales que se encuentran disueltos en el suelo, donde están plantados, asimilando también moléculas orgánicas, y entonces poder ser adsorbidos por nuestro cuerpo, sin embargo, en estos tiempos de la vida moderna, estos vegetales también pueden asimilar fácilmente pesticidas y múltiples fertilizantes químicos que van a contaminar nuestra alimentación.

EL calcio  

Es el mineral más abundante de nuestro cuerpo, ya que le corresponde de 1.5 a 2% del peso corporal, y se encuentra fundamentalmente en nuestro huesos y en los dientes, pero tiene vital importancia en los procesos de la coagulación de la sangre, así como en la contracción de todos nuestros músculos, pero principalmente el musculo cardiaco, el calcio también es muy útil en el sistema nervioso, y en caso de que existan niveles bajos de calcio en la sangre, puede favorecer la aparición de la mal formación de los huesos como sería el raquitismo o la osteoporosis.

El Magnesio

Este metal está presente siempre en todas las células de nuestro organismo, pero principalmente en las células de nuestros huesos, dentro de sus funciones esenciales interviene en la activación de varias enzimas, y por supuesto tiene un papel muy importante en la producción de energía. La carencia de magnesio en estos tiempos actuales es bastante común, y puede favorecer la aparición de enfermedades comunes como las cardiopatías, así como la presencia de cálculos renales e incluso el cáncer.

Clínicamente se va a manifestar con importante cansancio físico, acompañándose de confusión mental, algunas veces se pierde el apetito y aparece insomnio, y como ustedes pueden darse cuenta, es muy común que estas manifestaciones clínicas por disminución de este metal, van a ser muy comunes en nuestra vida diaria y pueden ser motivo de preocupación y de consultas medicas, todo por tener una deficiencia de magnesio, por lo que se le considera muy útil para la prevención de enfermedades cardiovasculares, así como la prevención de ataques agudos de asma y de disminuir las complicaciones relacionadas con la diabetes.

Su ingesta hace que desaparezca el cansancio y la fatiga crónica, así como el clásico dolor de cabeza, y por supuesto la prevención de los cálculos renales. Se recomienda una dosis de 6 miligramos por kilogramos de peso corporal por día, este metal comúnmente es bien tolerado, por lo que es importante tomarlo en cuenta en nuestra alimentación diaria como suplemento.

Vamos a continuar insistiendo en educación en Salud con fines estrictamente preventivos, por lo que continuaremos con este tema en los próximos artículos, ya que nos falta mencionar los detalles de cada uno de estos ingredientes nutricionales, tanto vitaminas, minerales, los ácidos grasos esenciales, las fibras y muchos otros nutrientes. Si tienen ustedes alguna pregunta o comentario, por favor escribanos al correo drmorales1999@gmail.com o al teléfono 322 293 6161.