Sugerencias de psicología preventiva post-pandemia

En la medida que enfrentamos nuestros miedos oscuros, la luz de la esperanza y la victoria se incrementa

“Cuando no somos capaces ya de cambiar una situación, nos enfrentamos al reto de cambiar nosotros mismos.”  Victor Frankl 

Seguro que desde estas fechas ya estamos con la sensación respecto a que la pandemia ya pasó y estamos retomando nuestras actividades previas a la misma. La realidad es que no ha pasado y surgen incluso variantes que tiene en estado de alerta a más de un país, producto tanto del desconocimiento del origen del mismo virus como de las construcciones de las variantes del mismo. 

Sin duda, hay mucho por hacer en materia de salud médica y los cuidados no podemos dejarlos de lado ante el panorama en ocasiones poco alentador de cuantos faltan por vacunarse y de algunos casos que aun vacunados enferman o trasmiten el virus. 

En dicho contexto y enfatizando que sin dejar de seguir tomando las medidas sanitarias que ya todo mundo conoce (literal). Debemos igual considerar los aspectos psico-afectivos que están en juego ante el deterioro psicológico que como humanidad hemos o estamos padeciendo. Sin abundar mucho en ello, podemos señalar como antecedentes los siguientes: Miedo o terror de padecer la enfermedad y posible muerte como consecuencia, perdida de un ser querido, sea familiar o amigo, ruptura de las rutinas y actividades cotidianas que nos hacían tener o construir zonas de confort, tales como trabajo, escuela, vida social, deportes, recreación y toda la actividad involucrada en ello.  

Pues bien, ante dicho panorama y el paulatino programado regreso a clases, trabajar y diversas actividades sociales, tendremos que reflexionar y, proponer y actuar psico-socialmente de tal manera que el regreso sea lo más sano posible, aquí algunas sugerencias.  

Intente ser amable y empático, usted no sabe por lo que la otra persona ha pasado o sigue pasando y los esfuerzos que puedan implicar para ella retomar su vida ya sea a través de su trabajo escuela u otra actividad.  

Incluya en su vocabulario habitual la palabra GRACIAS, se dará cuenta que predispondrá para bien a otras personas y usted se sentirá igualmente gratificado, el valor del agradecimiento es grande y es gratis.  

Si va a decir algo a un interlocutor, procure que sea algo amable o que lo haga sentir valioso o necesario en lo que está haciendo, intente mejorar la autoestima de los otros corrigiendo de maneras sensibles y amables los errores que cometen y que de hecho todos cometemos, las personas estamos más sensibles a los otros y receptivos a las retroalimentaciones, sean positivas o negativas.  

Invierta tiempo de calidad para usted con el fin de ser más reflexivo y de ser posible, ir a psicoterapia, clases de meditación o yoga, cualquier actividad que implique el autoconocimiento o insight.  

Dependiendo de su edad, recursos económicos, tiempo o alguna otra variable, busque realizar actividades nuevas, un hobby, un deporte, un pasatiempo, el desarrollo de un oficio, todo aquello que quizás postergo por falta de tiempo o de ganas.  

Haga una lista de las personas que, por diversos motivos, dejo de frecuentar o saber de ellas, retome las relaciones psico-afectivas y de ser posible, véalas personalmente, cuidando siempre los protocolos de salud, es importante por la salud de todos, vernos presencialmente y en la medida de lo posible prescindir de la virtualidad.  

Procure en la medida de sus tiempos y posibilidades, hacer algún viaje tipo turístico o de exploración de lugares que no ha visitado, no necesita ser lejos y menos caro, lo que necesita es ver lugares nuevos, hablar con gente nueva, identificarse con personas que no conoce y darse cuenta que todos hemos sido afectados, pero que igual entre todos nos podemos ayudar incluso con poco tiempo de conocernos.  

De ser posible, igual invente recetas nuevas, busque divertirse inventando y compartiendo sus recetas, los alimentos son muy simbólicos de vida, por ello los ofrecemos a quien amamos, pero igual cuide sus hábitos para que no sean otra fuente de estrés.  

En pocas palabras, la recuperación de nuestro equilibrio en materia de salud integral –si es que lo teníamos- pasa por hacer una planeación y ejecución de nuevos y viejos hábitos saludables y compartirlos socialmente. En la medida que enfrentamos nuestros miedos oscuros, la luz de la esperanza y la victoria se incrementa. Pase un lindo día y trata de estar feliz.