Las Mujeres Fuertes

Tu vida está llena de pequeños triunfos. Agradece por ellos, compártelos y disfrútalos

Adriana Fuentes / Escritora 

Bienestar 

Personalmente, defino la salud como el bienestar físico, mental, social y emocional. Estos aspectos están relacionados y van de la mano. Por lo tanto, alguien con un problema emocional todavía está enfermo sin importar lo bien que esté físicamente.  

La mente y el cuerpo están 100% conectados. 

A esto hay que añadir que la salud depende enteramente de nuestra capacidad para responder positivamente a los retos que nos presenta la vida. 

En lugar de esperar a que suceda algo extraordinario, debemos aprender a disfrutar de los momentos y las pequeñas cosas que forman parte de la vida cotidiana. Vivir mejor, implica hacerlo en armonía con uno mismo, con la salud, y saber priorizar las cosas necesarias e importantes.  

Sabemos que la vida es compleja a menudo, que a veces nos trae cosas que están fuera de nuestro control. Pero nos toca a nosotros mismos, saber afrontarlos con fuerza, reflexión y buscando siempre ese camino que nos pueda llevar a la felicidad. 

Deja a un lado lo que te duele, mantente alejado de aquellas personas que solo te traen problemas y te rodean de su negatividad. Cumple con tus obligaciones del día a día, pero encuentra un momento para ti en el que puedas dejar a un lado las ansiedades, las presiones y los miedos. 

Te aseguro que tu vida está llena de pequeños triunfos. Agradece por ellos, compártelos y disfrútalos. 

La comida es salud. El ejercicio es salud. La meditación y la atención plena son salud. La salud, en términos de bienestar general, es la verdadera riqueza. No es el tamaño de su casa, la cantidad de automóviles que posee o los dígitos de su cuenta bancaria.  

“Sé feliz en el momento, eso ya es suficiente. Cada momento es todo lo que necesitamos, no más.” 

Madre Teresa