¿Le falta “algo” a tu relación?

¿Te sucede que de pronto, a pesar que no has dejado de amar a tu pareja, sientes que algo te falta? Quizás sientas que le falta romanticismo, o más tiempo juntos, a lo mejor sientes que las responsabilidades del día a día no se reparten de la manera justa. Pues bien, si así te sucede, no creas que sólo te sucede a ti. La realidad es que es una situación de lo más común y que, lamentablemente, no se habla o comparte lo suficiente como para que se atienda y deje de sentirse esa insatisfacción.

En psicoterapia, una de las temáticas que suelo recibir con mayor frecuencia, es justo esa insatisfacción al interior de las relaciones; y no sucede sólo en la mujer, como quizás se pudiera pensar, sino también en los hombres.

A menudo les digo a mis pacientes que, vivir en pareja, es una de las tareas más difíciles que existen (la otra es la crianza). Formar una pareja estable, duradera y en la que ambos se sientan plenos o satisfechos de lo que dan y lo que reciben, es un arte, por lo tanto no es tan fácil de lograrlo.

Para poder llevar esto a cabo, o por lo menos acercarse lo más posible, algo que es sumamente importante (como siempre) es la comunicación. Pero, ¿comunicar qué? A veces solamente sentimos que nos falta algo, pero no sabemos exactamente qué, o quizás sí identificas qué te falta, pero no sabes cómo expresarlo; incluso podría ser algo que pasa también a menudo, que es el hecho de sí saber qué, sí haberlo comunicado, pero no haber conseguido el cambio que esperabas. Es decir, sí le has dicho a tu pareja lo que te falta o necesitas, pero no se te ha hecho caso.

Ahí es cuando hay incluso más desesperanza, desilusión y tristeza, pues se percibe que a la pareja no le importa o se piensa que la pareja no quiere poner de su parte.

¿La realidad? La realidad es que muchas veces tanto la persona que siente insatisfacción como su pareja, no le dan suficiente importancia a las quejas del otro.

Si tenemos la intención de vivir la mejor versión de nuestra relación de pareja, lo mejor es que periódicamente estemos evaluando el grado de satisfacción que tenemos en ella. Así como en nuestro trabajo o negocio necesitamos estar evaluando las ganancias, el producto o servicio que vendemos, así como las estrategias que utilizamos para que el negocio funcione, así también deberíamos invertir un poco de tiempo en saber si en la relación vamos por buen camino.

Las sugerencias que puedo hacerte hoy son las siguientes:

• Si tu pareja se queja con frecuencia de algo, no lo eches en saco roto. Cuando algo no nos está gustando, es necesario que atendamos la queja.
• Si eres tú quien constantemente se queja de que le hace falta algo, pero sientes que no se atiende a tu queja, busca cambiar de ambiente a la hora de compartir con tu pareja tu sentir. Siente tu malestar y dale la importancia que tiene. Se vale decir “no me siento feliz en la relación”.
• Una recomendación que no podría dejar pasar es que leas el libro “Los cinco lenguajes del amor”. Aprender que existen diferentes formas de expresar nuestro afecto puede cambiar radicalmente tu vida de pareja, pero también podría incidir de manera favorable en cualquier relación afectiva que tengas.

Tenemos diferentes necesidades y también distintas formas de expresar nuestro afecto. La crianza, la cultura y nuestras experiencias de vida van moldeando la forma en la que nos relacionamos y en la que demostramos lo que sentimos. Así como aprendemos podemos desaprender, por lo tanto podemos esforzarnos en desarrollar nuevas habilidades que ayuden a nuestra pareja se sienta plena con nosotros, y también merecemos que nuestra pareja se esfuerce en desarrollar áreas que permitan que nosotros nos sintamos plenos y amados.

Finalmente, como también lo suelo decir, si no sabes cómo o por dónde, no dudes en buscar ayuda profesional. No te vas a arrepentir.