En busca de platos perdidos: El Teul
No ha de pasar el viandante por los pueblos como borrasca de primavera ni ventisca de otoño...
El Teul un pueblo que evoca historia, costumbres y gentes religiosas. Pueblo pintoresco, hermoso y añoso, elegante y orgulloso.
Frente a la plaza bellas arcadas
LA EXCURSIÓN
“Que no se acostumbre el pie a pisar el mismo suelo, ni el tablado de la farsa, ni la loza de los templos, para que nunca recemos como el sacristán los rezos, ni como el cómico viejo digamos los versos”.
León Felipe.
No ha de pasar el viandante por los pueblos como borrasca de primavera ni ventisca de otoño. Ha de buscarle su modo y figura, hablando con sus gentes y leyendo sus libros, que ahí y sólo ahí, se encontrará su historia y su presente.
EL TEUL PUEBLO MÁGICO
Aceras de cantera rosa labrada por artesanos anonimos, arroyos con piedras ahogadas en cemento y naranjos en flor en sus calles como marco a la riqueza arquitectonica de un pueblo pleno de nobleza e historia.
Antiguas casonas de recias fachadas y techos altos, con saguanes abiertos, altas ventanas con postigos y cortinas de tul; rehenes de hierros forjados y en los corredores llenos de luz, fantasmas de jaulas donde antaño alegraban gorriones y cenzontles. Plenos de macetas con olorosas begonias, belenes y helechos mientras en el centro del patio el agua cantarina flluye de fuentes de cantera refrescando el ambiente.
Calles y plazas, rincones y lugares comunes donde la alegría del entorno invita a la holgura y su gente sencilla con candor sincero da la bienvenida al viandante. Se camina por calles silenciosas y ausentes escuchando el viajero sus propios pasos, sólo interrumpida la tranquila mañana por los sonidos del reloj que da la hora en el templo cercano.
“Muchos visitantes se extrañan de ver nuestras calles vacías y le llaman Pueblo Fantasma”. Nos cuenta Karla Lorena González encargada del Museo de Historia de El Teul, Zacatecas. Curiosos preguntamos la causa de la ausencia de gente en las calles, y nos explica que así ha sido siempre. “Es una cuestión de cultura del pueblo, sin embargo, -agregó- todos sabemos qué sucede en las calles. Es parte de nuestra naturaleza”.
Es El Teul un pueblo que evoca historia, costumbres y gentes religiosas. Pueblo pintoresco, hermoso y añoso, elegante y orgulloso. Es un ejemplo para muchos Pueblos Mágicos del país por su limpieza, orden y cabalidad. Lleva El Teul en su genio y figura el perfil de los nativos de Los Altos; raza bella, de hermosos ojos y tez blanca las mujeres y altivo porte los hombres.
En su obra: “Un Rincón de la Suave Patria”, escribe Luís Sandoval Godoy: “El pueblo se tiende suavemente en las faldas del cerro que lo ampara, como se anidaría un niño en el regazo de su madre”.
EL TRAYECTO
Habíamos dejado la ciudad con el propósito de descubrir algunos pueblos al norte del Estado de Jalisco, más allá de Zacatecas: Tlatenango de Sánchez Román (que optamos dejar para una próxima excursión) y El Teul de González Ortega. Emprendimos la aventura el primer día de Semana Santa mi hija y su esposo, mi esposa y quien esto escribe. Cruzamos el renombrado Río Santiago por San Cristobal de la Barranca a buena hora de la mañana y proseguimos por la carretera hacía el norte promisorio que lleva a los viajeros hasta Colotlán Jalisco, atravesando parte del sur del Estado de Zacatecas.
Es un camino sinuoso que se acomoda a los contornos del terreno que sube y baja por las estribaciones de la Sierra Madre Occidental, remontando cañones hechura de siglos por los ríos: Santiago, Juchipila y Cuixtla. Lomas cercanas y serranías alejadas cubiertas de paisajes dorados, reflejo de zacatales secos y tierras sedientas. Sólo racimos de altos y esbeltos órganos pitalleros que parecen implorar al cielo gotas de vida. En la alta planicie aparecen estrechos valles vergeles de frutales, y como guardia de honor a lo largo del camino los robledales, encinales y pinares guarecen al viajero. Aldeas que aunque de pobre semblante no acusan miseria. Hemos ascendido de un nível de 800 msnv a más de 2,000 en lo alto de la sierra. Mucho del placer del viaje lo encontramos en el viaje mismo, no necesariamente en muestro destino incierto.
CONTINUARÁ…
Sibarita01@gmail.com
Elsybarita.blogspot.mx