Presión Ambiental

Por M en E Marisú Ramírez Muñoz

Los paradigmas sociales condicionan por medio de exasperantes modos de vida

Jamás en toda la historia de la humanidad la presión ambiental ha sido tan fuerte como hoy. Los paradigmas sociales condicionan por medio de exasperantes modos de vida, y sólo se cuenta con tribales desafíos para lograr sobrevivir, con pocos o casi nulos ecos de libertad y de conciencia.

Para ello, es importante señalar que el padre de la teoría de la evolución, Charles Darwin, llamó selección natural al efecto de la presión ambiental y de la competencia con otras especies por los recursos disponibles. Para lo cual, podría decirse que la Presión ambiental o ‘social’ como ahora se le conoce, es señalada como un fenómeno, y que bien podría ser la fuerza que desencadene el cambio evolutivo.

Para ejemplificar lo anterior, se describe un video que se ha hecho viral en los últimos días, donde una maestra muestra una carpeta color verde a sus alumnos y les pregunta:

“¿De qué color es esta carpeta? ¡Verde!, responden sus alumnos. Si algún alumno llega tarde a clase como acostumbra suceder, yo le preguntaré por el color de la carpeta y ustedes me dirán: Roja ¿De acuerdo? Si, respondieron todos. Al poco rato entra un alumno en la clase. ¡Hola! llega tarde, pero pase.

Bien. Sigamos. En filosofía hay corrientes como el positivismo que no admiten otra realidad que no sean los hechos. Por ejemplo, el color de esta carpeta. Entonces la profesora le pregunta a uno de los alumnos: ¿Usted, de qué color es esta carpeta? Roja. Tal y como lo habían acordado, recibe la misma contestación de otros alumnos elegidos al azar.

El alumno recién llegado, que ve que la carpeta es de color verde, se asombra por la contestación de sus compañeros que la ven de otro color. Al poco rato le llega su turno y la profesora le hace la misma pregunta ¿Y usted? Tras muchas dudas consigo mismo, y aun viendo que la carpeta es de color verde, contesta: ¡Roja!’.

Su contestación provoca la inmediata reacción de sus compañeros que comienzan a reírse. Finalmente, la profesora, dirigiéndose a todos, dice: Está claro que la carpeta es de color verde. Y han sido testigos directos de la debilidad del ser humano cuando es sometido a la presión ambiental, incluso en lo que se refiere a la percepción física.

Más no contento con la situación, el alumno interpelado replica: Bueno, yo me dado cuenta de que era un juego. Me parecía rara la pregunta. La carpeta claramente es de color verde. A lo que profesora le responde: Pero como todos han dicho roja, usted ha dicho roja.

El ejemplo puede ser muy básico, pero la realidad es que, a lo largo de la existencia ¿Cuántas veces las personas se han visto sometidas a este tipo de presión ambiental? Se sabe, se tiene el conocimiento, se tiene la certeza, pero la presión social es fuerte.

Esta podría ser la causa directa de tanta infelicidad en el mundo. Se desea azul, pero por presión social se elige rojo. ¡Aquí siempre ha sido así! Podría responderse. Y esto es un gran inhibidor de talento al evitar que ideas frescas invadan nuestros ámbitos: políticos, científicos, económicos, educativos…  y en general, en todos los sentidos.

Tal vez, en algunos años, cuando ya sea tarde… cuando nos demos cuenta que irreversiblemente destruimos nuestro planeta con tanta guerra estúpida, cuando ya no tengamos más agua limpia para beber, cuando el último árbol sea talado, cuando nos demos cuenta que las armas no se pueden comer, cuando nuestros niños nos cuestionen ¿Qué mundo me has dejado?… Sólo entonces, desearemos regresar a ese punto, cuando no supimos defender nuestras convicciones, nuestras ideas, ni nuestros sueños; sólo por una ilusa “Presión ambiental” http://letrassahumerias.blogspot.com/