Interactuar

Letras Sahumerias

La globalización se ha concentrado en las perspectivas de los mercados y no en las otras carencias como son la libre información, la democracia, la educación, la cultura y la ética de los países llamados emergentes

Marisú Ramírez

Es necesaria una transformación profunda por cada uno de los avances sociales o tecnológicos, exigirle a la actual humanidad ser nunca más aquel que es, evolución psicológica, desde lo intelectual a partir de la educación innovadora.

Establecer distancia sensata con cada una de las transformaciones al considerar esas oleadas ideológicas, cual fenómenos utópicos difíciles de comprender, las ideas de la sociedad ven llegar armonía, estabilidad emocional o solución a sus problemas; la verdad se transforma en soluciones falsas, las problemáticas persisten, aquejan. La sociología y antropología estudian los cambios de actitudes basados en estudios psicológicos, de ahí se explica la debilidad de las sociedades para enfrentar cambios verdaderos y trascendentales.

Toca vivir o padecer antivalores en escenarios distintos, actitudes ausentes de verdad. Detonantes de la inmovilización mental. La globalización alimenta con matices utópicos una cultura ajena, esto no debe ser así, las grandes utopías del pasado han caído en la decepción social y han acarreado tremendos costos humanos y económicos, es oportuno destacar la necesidad de no caer en idealismos excesivos, ejercer una actitud de certeza, reflexión e imaginación que haga frente a los cambios que se avecinan en México y en el mundo.

No hay duda, aún permanece el sufrimiento en todos los continentes, las viejas demandas políticas y económicas se afrontan por los líderes mundiales con ligereza, además de otras problemáticas anunciadas por la naturaleza, cambios lamentables de este nuevo milenio, ejemplo: Una hegemonía abierta y declarada de los grandes capitales, mayor influencia de los medios masivos, la manipulación o al menos el constante intento de estandarización de modelos sociales y por ende culturales.

Asimismo, mayor tensión entre los organismos no gubernamentales (de carácter multinacional) y los grandes intereses creados entre gobernantes maniatados y los capitales de clase mundial.

De ahí la importancia de la educación del futuro. Los retos en la actualidad en todos los renglones descritos anteriormente, señalan agudas competencias mundiales y nacionales las cuales se ven afectadas por una inercia llamada pomposamente “modernidad”, estándares competitivos pobres para las sociedades humanas, se requieren cambios con mayor originalidad y autenticidad cultural y educativa, valorar la destrucción del medio ambiente siempre con la idea presente que es nuestra única razón de existir, jamás estar formados en naciones cerradas a los cambios hasta convertirse en naciones limitadas o manipuladas por  intereses ajenos a la razón, rescatar a los jóvenes desde la educación básica hasta la profesional es el deber de las instituciones responsables.

México hoy es una cultura fraccionada, con la integración de un elevado número de etnias y grupos sociales olvidados, a los cuales no se les han resuelto sus problemas, con los avances tecnológicos se tendrá el deber de enfrentar esas necesidades en complemento con otras acciones oficiales, esos indígenas son nuestra sangre, no darles la espalda o hacerlos víctimas del desprecio y el ingrato olvido. Otorgarles bienestar será responsabilidad ineludible y desde la educación integrarlos a nuestra vida cotidiana. La ética global los ha segregado, es un proceso y llevará tiempo voltear a verlos.

La educación es un reto permanente del futuro de México, frente a la globalización es fundamental la apertura de las tecnologías de la información, el acceso a los conocimientos más avanzados, así como a los adelantos técnicos de otras naciones del llamado primer mundo, será primordial, comprender y compartir los aciertos de esas naciones, queda claro.

La globalización se ha concentrado en las perspectivas de los mercados y no en las otras carencias como son la libre información, la democracia, la educación, la cultura y la ética de los países llamados emergentes, proveedores de mano de obra barata, así como un nicho de consumidores sin más acceso fuera del consumo desmedido de satisfactores banales, las naciones con amplios recursos naturales y población consumidora, como lo ha sido por mucho tiempo México, difícilmente lograrán una participación democrática en el elenco global. masryram@msn.com