El futuro de la oposición en México

Hablemos en serio / Javier Orozco Alvarado / Investigador de El Colegio de Jalisco, A.C.

Claudio X, el ideólogo y líder de la retrógrada y reaccionaria organización de Va X México, no se midió en su ambición de poder

El pasado domingo 5 de junio se llevaron a cabo elecciones para gobernador en 6 estados de la República, de los cuales 4 fueron ganados por los candidatos de Morena y 2 por los partidos de la alianza denominada Va X México, que está integrada por el PAN, PRI y PRD y que es dirigida por el multimillonario Claudio X González.

Más que celebrar el triunfo de un 4-2, como si fuera un partido de futbol, es la oportunidad de reflexionar lo que significa que un partido tan fuerte, como fue el PRI en el pasado, ahora se haya convertido en una especie de partido satélite, al igual que el tristemente Partido de la Revolución Democrática; quienes por la ambición de poder cedieron su integridad, su dignidad y hasta su identidad ideológica en favor de un partido que históricamente representó a la ultraderecha y  la fuerza política del sector empresarial. No sin razón, estos tres partidos se han convertido en el instrumento de Claudio X González para intentar derrocar a Morena e ir en contra el proyecto económico y político que encabeza el presidente Andrés Manuel en favor de todo el pueblo de México.

Y digo que en favor de todo el pueblo de México porque, hasta ahora, este gobierno mantiene activos todos sus programas sociales, sigue subsidiando el consumo de bienes para contener la inflación y no ha  emprendido ninguna acción en favor del comunismo, despojar a los empresarios de sus negocios, de sus fortunas o de su patrimonio; excepto obligarlos a que cada quien pague los impuestos que le corresponden, que paguen las tarifas justas por el consumo de energía eléctrica, que cumplan con los contratos que contrajeron con anteriores gobiernos y que las transnacionales dejen de sustraer nuestra riqueza nacional.

Por eso, por más intentos que haga la oposición de confundir a los electores, de que la alianza opositora de Va X México es para salvar al país del comunismo, democratizar las instituciones, resolver la inseguridad, favorecer a los más pobres o introducir energías limpias, lo cierto es que moralmente no tienen credibilidad, porque ellos mismos fueron los causantes de una crisis estructural que en el corto plazo ha sido difícil resolver.

Por eso, una parte del sector empresarial y el grupo de autores intelectuales de esa alianza, como Denise Dresser, Héctor Aguilar Camín, Jorge Castañeda, Enrique Krause, Silva Herzog, entre otros, intentan convencer a la gente sobre lo catastrófico de este gobierno; no quieren entender que el voto de la población en contra de esa alianza es la respuesta a los agravios que durante décadas sufrimos la mayoría de los mexicanos de la mano de los malos gobiernos de esos partidos que ellos mismos siguen legitimando.

De no ser así, la alianza Va X México hubiera arrasado en estas pasadas elecciones. Pero el recuento de los resultados muestra que, con todo y sus alianzas, el PRI perdió los estados de Hidalgo y Oaxaca, el PAN perdió Tamaulipas y el PRD Quintana Roo. De los dos triunfos de la alianza, con el apoyo directo del gobierno de su misma filiación, el ganador en Durango es un priista y la ganadora en Aguascalientes una panista.

Así las cosas,  en el panorama para la elección presidencial de 2024, Morena llegará con un total de 20 estados bajo su marca, el PAN con 6, PRI con 2, MC 2, Verde 1y PES 1. Pero todavía falta ver si el PRI seguirá conservando el control en Coahuila y el Estado de México, que tendrán elecciones en 2023; con lo que podría quedar eliminado del mapa político como partido, al igual que el casi extinto PRD, de cara a la elección presidencial.

Por eso, diversos analistas consideran que, después de las elecciones presidenciales del 2024, es muy probable que MC pudiera convertirse en la tercera o segunda fuerza política, lo cual significaría que este partido podría ser en el futuro el partido de la alternancia y llegar a ocupar los lugares que un día ocuparon el PRI o el PAN en la vida política nacional.

En ese sentido, el reciente rechazo de MC a unirse  a la Alianza Va X México, a pesar de las amenazas y de las posibles consecuencias que advirtió Claudio X González, tendría para este partido el no sumarse; fue la mejor decisión de sus dirigencias. Especialmente porque el susodicho líder empresarial llegó a Guadalajara a restregarle en la cara al Gobernador de Jalisco, que en esta alianza estaría gente fresca no tan vista, que podía encabezar la candidatura a la presidencia en 2024; haciendo casi alusión directa al joven Luis Donaldo Colosio, en un estado donde MC tiene su principal bastión a nivel nacional.

Lo cierto es que Claudio X, el ideólogo y líder de la retrógrada y reaccionaria organización de Va X México, no se midió en su ambición de poder y en su falta de tacto para entender que, si alguien busca abanderar a Morena para la presidencial, es el propio Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro.