El amor como poder

Educación y parentalidad / Dr. Jesús Cabral Araiza

Recuerde que no hay mayor poder que el del amor

“Si yo pudiera darte una cosa en la vida, me gustaría darte la capacidad de verte a ti mismo a través de mis ojos. Sólo entonces te darás cuenta de lo especial que eres para mí”.  Frida Kahlo

Es imposible sustraerse a la tentación de analizar por estos días el concepto de amor. Pretendo ir más allá de las muestras de amor hedónico y superficial comercial con las que suele encasillarse, o que se espera demuestre una persona que ama a otra con elementos materiales y comerciales. No, en esta oportunidad trataré de plantear de manera diferente, puntos de reflexión y análisis y que principalmente le sirvan para practicarlo y fomentarlo.

Precisamente un autor obligado es Erich Fromm, quien en su obra magistral plantea, “El amor es ante todo un es una facultad como el arte, y todo arte necesita de la comprehensión de la parte teórica para poder aplicarlo en la práctica exitosamente”. El arte de amar divide el amor en dos tipos que no deben ser confundidos. Ellos son:

El amor como solución inmadura o ‘unión simbiótica’, cuyas formas extremas se representan en sumisión o sadismo para la forma pasiva, y dominación o sadismo en la forma activa; y el amor como solución madura al problema de la existencia, que significa una unión sin perder nuestra propia individualidad. Según el arte de amar el amor sería una paradoja de dos seres que se convierten en uno, pero siguen siendo dos.

“El amor inmaduro dice: ‘Te amo porque te necesito’, mientras que el amor maduro dice: ‘Te necesito porque te amo’.” Con ello podremos entender que no es tan sencillo circunscribir a una descripción vaga un sentimiento tan poderoso.

Y claro, no es lo mismo el amor a los hijos, a la pareja, a los padres, a los amigos, a la naturaleza. Tampoco significa que el amor sea direccional, es, si se desea ver integral, bidireccional, pues de otra manera caeremos en el amor platónico que no “espera nada a cambio” idealización comercial para describir un estado emocional pragmático.

De igual manera, agregaría que el amor es cultivado y fomentado de diferente manera y acorde a nuestra edad mental, cronológica y experiencia de vida acumulada. Por mi parte, puedo compartir que mi vida es completa y plena, entre más personas amo y me aman, que siento el amor de las personas importantes para mi y respondo en consecuencia. La poesía, la música y las artes son poderosos aliados para tratar de explicar muchos sentimientos de amor que se atoran en el camino, le sugiero explorar esos terrenos del arte.  

Aprovecho para decir que amo a mis hijas adoptivas y que igual me siento amado por ellas, a todas y cada una tienen mi apoyo incondicional siempre: Alma, Mitzy, Aresmi, Griselda, Abu, Pamela, Monse, Jazmín, Marisol, Ángeles y Mafer. A todas ellas gracias por ser y estar.

Tantas personas que ahora recuerdo y que me faltaría espacio para mencionarlas, pero que he tratado de que sientan mi apoyo y muestras de cariño y amor, pero de eso se trata la vida, de construir nuevos andamiajes de apoyo y afecto, para que cuando yo transite a nuevos caminos y voltee a los lados, me sienta acompañado.

Mención especial a mis dos hijos, por quien sigo luchando para que se sientan orgullosos de mi y hacerlos personas de bien, los amo infinitamente. Recuerde que no hay mayor poder que el del amor, y espero no me crea y revise la historia, la personal, o de las naciones. Gracias por leer estas líneas.