El éxito compartido, elemento esencial en la fórmula del liderazgo

Empresa Familiar

Empresas cuyos líderes promueven el compartir sus habilidades y capacidades, tendrán como resultado que en determinado tiempo su personal sea igual o con mayores capacidades y habilidades que el propio líder

“El verdadero líder siempre va un paso más adelante que su equipo, sin embargo, no lo deja atrás, lo guía para crear más líderes. El saca lo mejor de los demás.” José Augusto

José Mario Rizo Rivas

“El Líder más grande es aquel que está dispuesto a entrenar a otros y a desarrollarlos hasta el punto en que, con el tiempo, lleguen a superarlo en conocimientos y capacidad.”

John C. Maxwell

Los líderes saben qué camino tomar, qué ventajas y oportunidades tienen, con qué herramientas cuentan, sus necesidades y deseos, sobre todo el deseo de compartir de sus conocimientos para que otros los aprovechen en beneficio común. Es decir, son los directores de la orquesta y principalmente conocen las fortalezas y debilidades de sus músicos, y saben combinarlos para que la melodía se escuche perfecta.

“El verdadero líder siempre va un paso más adelante que su equipo, sin embargo, no lo deja atrás, lo guía para crear más líderes. El saca lo mejor de los demás.”

José Augusto

Compartir para crear líderes

Empresas cuyos líderes promueven el compartir sus habilidades y capacidades,  tendrán como resultado que en determinado tiempo su personal sea igual o con mayores capacidades y habilidades que el propio líder. Estos líderes saben cómo identificar y contratar a otros líderes, no son egocéntricos, reconocen la capacidad en el otro, dándole su propio liderazgo y empoderamiento en beneficio personal y del equipo, garantizando la existencia de un sucesor que continúe con éxito. Están convencidos que solos es imposible lograr grandes resultados.

Asimismo, tiene como prioridad el capacitar, desarrollar y crear grandes equipos de trabajo para que sus empresas o negocios crezcan y tengan éxito. Lo que provoca un aumento en el nivel de calidad, productividad y en sus resultados. Un líder sabe que la pistola está cargada, cuándo debe disparar y a quién.

Cuando su personal comete errores o no cumple correctamente con las tareas,  se reúne con él y revisa el trabajo, dialoga, dice en qué está mal y cómo pueden mejorar. Se acepta como principal responsable y como propios los errores del equipo, y esto fortalece de manera indudable su liderazgo.

Algunas de las principales cualidades que  identifican un buen líder:

Actitud Positiva. Mentalidad de triunfo y crecimiento sin límite.

Autodisciplina.  Están en constante desarrollo y capacitación.

Carácter.  Es sólido, directo y decisivo ante sus necesidades no deseos.

Confianza. Seguridad de lo que va a realizar,  a corto mediano y largo plazo.

Innovador. Busca introducir nuevas ideas que consolidan el crecimiento de sus colaboradores.

Capacidad. Reconoce el poder y deber hacer, sus límites y los de su equipo.

Trabajo en equipo. Sabe que 2 son mejor que uno. Reconoce que un equipo multiplica habilidades, minimiza debilidades y optimiza su potencial, aumentando posibilidades de obtener mejores resultados.

Vince Lombardi dijo “Los logros de una organización son el resultado del esfuerzo combinado de cada individuo.”

Capacitación

Aumentar y promover dichas cualidades requiere capacitación, la cual se convierte en una inversión al sustentarse en necesidades reales del personal, orientando al equipo para aprovechar sus fortalezas y nivel de capacidad, ayudándolos a crecer para lograr su máximo potencial. Capacitar involucra tiempo, dinero y esfuerzo, así como grandes resultados. Es importante en el proceso hacer críticas honestas y ofrecerle las herramientas necesarias para poder desarrollarse de la mejor manera.

 Todos ganan 

Es importante mencionar que el desempeño de los grandes líderes beneficia de manera directa a las empresas, ya que estos aportan gran cantidad de conocimientos, habilidades, valores, capacidad y sobre todo ganas de llegar al éxito. En un determinado tiempo en que el líder esté ausente, sus colaboradores estarán preparados para cumplir con su tarea/trabajo, asumiendo el liderazgo con confianza y responsabilidad.

Uno es una cifra muy pequeña para alcanzar la grandeza. Los grandes éxitos se consiguen con el trabajo y esfuerzo colectivo. Los que no se esfuerzan al máximo, no podrán tener éxito, porque siempre a mayor esfuerzo, mejores resultados. Esta fórmula no falla.

Napoleón Hill lo define así “El líder exitoso debe entender y aplicar el principio del esfuerzo cooperativo y ser capaz de inducir a sus seguidores a hacer lo mismo. El liderazgo exige poder y el poder exige cooperación”