La plaza Lázaro Cárdenas

La plaza Lázaro Cárdenas

Voceros Incansables

Por Félix Fernando Baños

fbanoslopez80@gmail.com

En la plaza Lázaro Cárdenas se han instalado cuatro esculturas propiedad del H. Ayuntamiento de Puerto Vallarta y hay dos de propiedad particular. Por eso, antes de seguir comentando sobre las esculturas conviene hablar de la plaza misma.

La plaza Lázaro Cárdenas está limitada por las siguientes calles: al oriente, Aquiles Serdán; al norte, Lázaro Cárdenas; al poniente, Olas Altas; y al sur, Venustiano Carranza. Es el mayor predio municipal de la colonia Emiliano Zapata.

Quiso trasladar allí la Presidencia Municipal el alcalde don José Vázquez Galván, quien ocupó para su construcción el sesenta por ciento de la superficie, dejando en obra negra, al final de su mandato, los muros del primer nivel del edificio. El resto del terreno lo ocupaban dos plazas de las mismas dimensiones, quedando una al oriente y otra al poniente de la futura Presidencia. El jardín de niños “Emiliano Zapata” y la Agraria, sede del ejido Puerto Vallarta, flanqueaban la plaza oriente. La plaza poniente, en cambio, quedaba frente a la playa, en contra esquina por el sur con el restaurante Daiquiri Dick’s.

Como el Alcalde arquitecto Jorge Leobardo Lepe García ya despachaba en el flamante Palacio Municipal, tuvo la idea de utilizar la obra negra dejada en la colonia Emiliano Zapata por don José Vázquez Galván, para que fuera la Casa de la Cultura de Puerto Vallarta. La plaza oriente, contigua a la mencionada obra negra, había sido convertida años antes en la Plaza Emiliano Zapata por el ingeniero Eugenio Torres Ramírez, a raíz de que instalara en ella el busto del prócer, puesto anteriormente en la Rinconada de las calles Púlpito y Olas Altas. El arquitecto Lepe buscó entonces al señor Máximo Cornejo Quiroz para proponerle que donara la estatua del presidente Lázaro Cárdenas para la plaza poniente. Don Máximo tenía guardada dicha estatua en el patio de maniobras del hotel Delfín después de que la Junta Federal de Mejoras Materiales lo obligara a retirarla de la playa de Olas Altas, donde la había instalado. Así, la Casa de la Cultura de Puerto Vallarta quedaría flanqueada por las plazas Emiliano Zapata, al oriente, y Lázaro Cárdenas, al poniente.

Al querer iniciar los trabajos para convertir la obra negra en la Casa de la Cultura, el arquitecto Lepe se encontró con que el Fideicomiso Puerto Vallarta había vendido el terreno a un particular para que construyera allí un hotel.  De inmediato lo comunicó al Gobernador de Jalisco, licenciado Enrique Álvarez Del Castillo, quien ordenó que se iniciara el juicio de recuperación.

El juicio terminó a favor del H. Ayuntamiento siendo Presidente Municipal el licenciado Aurelio Juventino Rodríguez Garza. Habiendo decidido este Alcalde convertir en plaza pública todo el terreno, demolió la obra negra existente. Y como don Máximo Cornejo Quiroz hizo efectiva su promesa, donando la estatua del Presidente Lázaro Cárdenas, se le puso su nombre a la plaza.

La plaza se convirtió también en estacionamiento durante el Gobierno Municipal del licenciado Gustavo González Villaseñor.