La ideología del “Yo-Yo” es egoísta y solo se piensa en uno mismo

Las empresas deberían de ser como la pirinola del éxito donde “todos ganan”. ¡Descubre cómo!

Ten en cuenta que el éxito total nunca se logra solo, aun cuando tengas cualidades especiales y un buen negocio. Es sobre todo un trabajo de equipo, de constancia, de método y de organización.

En esta nueva pirinola empresarial en la que todos ganan, el provecho mutuo será la base para que tu relación personal y comercial perdure

José Mario Rizo Rivas

Empresa Familiar

“El éxito no se logra solo con cualidades especiales. Es sobre todo un trabajo de constancia, de método y de organización.”

 J.P. Sergent. 

Dos de cada tres empresas mexicanas quiebra o “muere” antes o al cumplir su primer lustro de vida productiva. Sin embargo, refirió el organismo, al transcurrir más de 10, 15, 20 o 25 años, la tasa de mortalidad empresarial se dispara hasta 76%, 82%, 86% y 89%, respectivamente.

Esto evidencia que sólo 11% de las compañías logra trascender a la próxima generación, y obtiene éxito y reconocimiento de los consumidores, es por ellos que las pequeñas empresas deben apoyarse de las grandes y viceversa, donde ambos resulten beneficiados, para de esta manera trascender más allá de las estadísticas.

Hace algunos años, el ambiente económico y empresarial era muy diferente al que actualmente se presenta, los mercados estaban protegidos, existían monopolios, la tecnología era escasa y la competencia era poca. Hoy en día, estos aspectos han cambiado radicalmente, la existencia de mercados abiertos, tecnología muy desarrollada y una competencia feroz, hace que la estructura, planeación y organización de las empresas hayan tenido que dar un giro conveniente. La cantidad de productos hacen que el cliente pueda escoger el que le parezca más adecuado, por eso las empresas deben mantener ventajas competitivas para liderar el mercado en calidad y costos.

El “ganar-ganar” puede verse como un juego en donde todos serán vencedores. Todos juegan en el mismo equipo y tienen en concordancia las estrategias y técnicas a utilizar; una sinergia de trabajo irrompible.

  El egoísmo, la cultura del Yo-Yo, es el primer obstáculo que se presenta en las relaciones de negocio. En realidad, no debe pesarte el que la alianza sea fructífera para la otra parte, ya que tú también estás obteniendo beneficios. En esta nueva pirinola empresarial en la que todos ganan, el provecho mutuo será la base para que tu relación personal y comercial perdure.

Ten en cuenta que el éxito total nunca se logra solo, aun cuando tengas cualidades especiales y un buen negocio. Es sobre todo un trabajo de equipo, de constancia, de método y de organización.  Entonces, busca los complementos que necesitas en otras personas o empresas, para que la suma de fortalezas derive en un efecto multiplicador. Al final, la suma de 2 más 2 nos da 10.

Por otro lado, es importante enfatizar que los beneficios quizá no sean siempre capitalizables o materializables de forma inmediata, sobre todo si la alianza no logra consolidar los objetivos planteados originalmente. La simple apertura, conocimientos y experiencia que se obtienen de una alianza, siempre dejará sabiduría que tarde o temprano se capitalizará en resultados ganadores. Ya lo dijo el Rey Salomón: “La mejor victoria es aquella en la que ganan todos”.

 

Para garantizar una relación donde ambas partes relacionadas salgan beneficiadas, es necesario aprender a establecer con quien será conveniente realizar una alianza

Ahora, ¿con quién realizar una alianza?

Para garantizar una relación donde ambas partes relacionadas salgan beneficiadas, es necesario aprender a establecer con quien será conveniente realizar una alianza, y para quién es útil entablar una relación empresarial. En este sentido, resulta indispensable que la empresa o persona con la que se va a trabajar, comparta los mismos valores, y en especial, el mismo manejo ético de los negocios. Tal compatibilidad es fundamental, pues puede minimizar los riesgos y proporcionar un resultado exitoso, como se incluye en la filosofía de la pirinola empresarial ganar-ganar.

El momento de unirse

¿Cuándo es propicio analizar la posibilidad de una alianza en una empresa?

  1. Acceso a mercados.Es común que, al buscar penetrar en un nuevo mercado, las grandes compañías internacionales busquen asociarse con empresas de otros países que, aunque de menor tamaño, conocen a fondo el mercado, la idiosincrasia local y los “manejes” de los negocios en su país.
  2. Aprovechamiento de tecnología.Para actualizar o mejorar la tecnología utilizada en los procesos de producción de un producto, las compañías suelen recurrir a un socio tecnológico. Este tipo de alianzas involucran, generalmente, un traspaso de know-how en ciertas áreas tecnológicas.
  3. Mercadeo de innovaciones.Se sabe que las innovaciones importantes en el mundo, no necesariamente se originan en las grandes corporaciones. Hay casos en que grandes compañías han buscado hacer de los inventores pequeños o medianos, sus socios en la explotación y mercadeo de determinado invento.
  4. Minimizar riesgos.Muchas alianzas exitosas presentan en sus orígenes la necesidad, por parte de uno de los socios, de aliarse con otra(s) compañía(s) para minimizar los riesgos de una inversión en nuevos productos, o de investigación y desarrollo.

Las alianzas estratégicas son una herramienta que proporciona grandes beneficios y en la que todos salimos ganando, ya que generalmente no se requiere de inversiones adicionales, sino de utilizar los recursos disponibles

Los aliados fortalecen la empresa

Puedes crear diferentes tipos de relaciones comerciales de acuerdo a la naturaleza de la compañía “aliada”. Se trata de tu competencia o habilidad, hasta un negocio que parezca ajeno al tuyo.

Lo mío más lo tuyo. “La unión hace la fuerza” Las alianzas de complementariedad son aquellas que se realizan cuando las partes se complementan, es decir, tu compañía ofrece productos o servicios que la otra compañía no tiene, y viceversa. Así los productos y servicios de ambas empresas son compatibles. Cito algunos ejemplos muy simples:

  • Tienes una panadería donde se hace el mejor pan de la región, y, por otro lado, existe una empresa que vende el mejor café. Ya que la gente acostumbra acompañar el café con una pieza de pan, ¿por qué no hacer una alianza?
  • Tienes una firma de consultoría profesional en varias áreas, pero tu firma es débil en el ámbito legal. ¿Por qué no realizar una alianza con una firma de abogados para complementar los servicios?
  • Tienes una empresa de banquetes, puedes aliarte con músicos, fotógrafos, empresas que rentan mobiliario y equipo para fiestas, empresa de luz y sonido. ¿Por qué no hacer una alianza para prestar servicios integrales para todo tipo de eventos sociales?

¡Hasta con la competencia se deben generar acuerdos! Aunque parezca sorprendente, puedes realizar diversas alianzas con tu competencia, pues son las que quizá podrían traerte mayores beneficios. Veamos algunos ejemplos:

  • Compras en conjunto: Puedes realizar la compra conjunta de materias primas y otros productos que utilicen en común, con el fin de obtener un mejor precio.
  • Vecindad de negocio: Es una práctica realizada para atraer más clientes y que brinda grandes frutos. Consiste en situar a proximidad negocios similares. Este tipo de alianzas son muy comunes en la ciudad, se hallan calles completas con establecimientos del mismo giro. Y muchas funcionan más por costumbre que por reglas claras o bien definidas y dejan de funcionar a mediano y largo plazo por la falta de las mismas.

Además de los ejemplos antes señalados, existen gran cantidad de alianzas entre compañías que dan como resultado la fórmula ganar-ganar. Aquí lo importante es que, en la negociación de la alianza, hay que buscar los puntos en los que todos los integrantes puedan beneficiarse. Inclusive, nuestras leyes contemplan figuras legales como las sociedades cooperativas, las asociaciones en participación, las sociedades de producción, las empresas integradoras, las asociaciones y sociedades civiles, que, aunque no garantizan un resultado exitoso per se, fijan el marco legal sobre el que los aliados deben regirse.

Para lograr alianzas efectivas y duraderas, es necesario dejar de lado el egoísmo, y que ambas partes aporten honestidad y confianza. Lo anterior parece una romántica descripción de pareja, pero estas condiciones son aplicables a las relaciones comerciales entre empresas. Los tiempos difíciles obligan a buscar formas para volver más eficientes y creativos nuestros negocios.

El principal activo son las personas

Las alianzas estratégicas son una herramienta que proporciona grandes beneficios y en la que todos salimos ganando, ya que generalmente no se requiere de inversiones adicionales, sino de utilizar los recursos disponibles (fortalezas) que se suman a las de nuestro aliado. Así que, saber aliarse puede cambiar completamente las estadísticas de los negocios que cierran y de los que no crecen. “Piensa en que ganar-ganar es una actitud ante la vida. Puedo ganar y los demás también”.

En este mundo no se logra nada útil ni grande si estamos solos. Siempre necesitamos de la ayuda de otros, creando un círculo virtuoso de generación continua de valor, y de máximo aprovechamiento de nuestros recursos.

La conclusión es que las alianzas se hacen entre personas, quienes representan a las empresas. Por lo tanto, cuando estas tienen y comparten los mismos valores y cuando los acuerdos se hacen por escrito de manera clara y precisa, la probabilidad de éxito es muy grande. No es posible alcanzar resultados auténticamente positivos si no trabajamos como aliados y en equipo, compartiendo nuestra visión, atributos, ventajas, competencias, capacidades y objetivos.

Generalmente, es mejor tener un porcentaje menor de un negocio o segmento del mercado, a tener el 100 por ciento de nada. Por lo anterior, debemos de buscar las alianzas estratégicas. Ya lo dijo el filósofo y político español, Juan Donoso Cortés: “Hay que unirse no para estar juntos, sino para hacer algo juntos”.

Inicia con tu proceso identificando tus fortalezas y tus debilidades para que busques alianzas que te hagan más fuerte. Elimina la cultura del Yo-Yo. De eso se trata la pirinola empresarial, el juego en el que todos ganan.

Aquí lo importante es que en la negociación de la alianza, hay que buscar los puntos en los todos los integrantes puedan beneficiarse.

Los tiempos difíciles obligan a buscar formas para volver más eficientes y creativos nuestros negocios.

Ya lo dijo el filósofo y político español, Juan Donoso Cortés: “Hay que unirse no para estar juntos, sino para hacer algo juntos”.