Es imposible no comunicar

Plumazos / Carmina López / Comunicóloga y mercadóloga

Comunicar de forma efectiva cumple un objetivo ineludible que exige a cada persona tomar decisiones

Gracias a Paul Watzlawick existe el axioma “no es posible no comunicar”, lo que es poderosamente cierto. Y estoy totalmente convencida de ello, por lo que cualquier intento por refutar sería un acto desgastante.

Ciertamente el lenguaje ha evolucionado y se ha adaptado a los cambios de las percepciones colectivas. Obedece al cómo interactúa una sociedad “global” que está pujante de una economía circular, inclusiva, más consciente, pero igualmente que disgrega y es menos participativa de forma masiva en el aspecto físico. Los tambores de lucha provienen más de las llamadas tribus – comunidades modernas.

Las formas en que se comunica esta sociedad global no son peores, ni mejores; simplemente son diferentes y hay fidelidad a las condiciones actuales de convivencia y a las problemáticas.

Comunicar es generar una reacción e interpretación; incluso si se guarda silencio se provoca una reacción e interpretación en el otro o grupo de personas.

Considerando que en la comunicación hay barreras de varios tipos: culturales, fisiológicas, idiomáticas, psicológicas, físicas, semánticas, administrativas.

Dichas barreras diferencian, disgregan, complican pero también enriquecen y aportan si se analizan las fortalezas.

El axioma de Watzlawick acierta en la dinámica social de todos los tiempos, y  explica en pocas palabras, cómo la humanidad ha logrado trascender y coexistir con barreras en la comunicación, que es el área más importante,  es la cuna de la humanidad.

Entendamos que sin la capacidad de comunicarnos al intercambiar ideas y compartir emociones -a veces inconscientemente-, no existiría nada, ni avances, transferencia de conocimientos, ciencia, tecnología; ninguna profesión en posible sin la comunicación.

En el 2017, con el tema Sin Puntos Medios, escribí en mi columna:

“En la cotidianidad también se esconden las respuestas, no se puede creer que al guardar silencio abandonamos responsabilidades. A esto hace justicia el axioma de Paul Watzlawick “es imposible no comunicarse”, con lo cual se impone la realidad absoluta de que el ser humano adquiere habilidades comunicativas para lograr fines en común. Comunicar de forma efectiva cumple un objetivo ineludible que exige a cada persona tomar decisiones”.

Todas y todos buscamos ser y trascender y lo logramos a través  de la comunicación.