Perdón

Perdón es olvido… ¿Acaso sé olvidar o recuerdo fácilmente las cosas perdonadas?

El más viejo de todos los libros publicados, dice que: “Debemos perdonar setenta veces siete”… ¿Estás dentro de ese grupo o solamente perdonas de palabra?… ¡Para volver a discutir lo perdonado!

En ésta maravillosa vida, hay siempre que renovarse para no quedar estancado en la misma porquería, repitiendo los mismos errores y horrores que lo único que nos trae como consecuencia es revivir momentos dolorosos y alejarnos cada vez más de nuestros seres amados…

Para perdonar a nuestros semejantes, es importante practicar con uno mismo…

O… ¿Acaso jamás le has fallado al ser más importante de tu vida, tú mismo?

Pues entonces… ¡Inicia hoy contigo!… ¡No te mientas!… ¡No te menosprecies!…

¡No te insultes!… ¡No te denigres!… Porque tú vales más que el mismo oro molido, que cualquier piedra preciosa, debido a que, sin ti, ya nada será igual, ni tendrá el mismo sentido, porque si dejas de existir… ¡Para ti nada será igual! Porque estarás en otro plano completamente diferente y lo existente, para ti… ¡No tendrá sentido!

No importa si naciste en buena o mala cuna, si te aprecian o te reprueban las personas con quien vivas; si te sientes importante o no dentro de tu propio hogar; lo más trascendental es ver cómo te desenvuelves y con una sutil sonrisa te das a respetar y le paras el alto a esas personas que tratan de humillarte o envilecerte… ¡Ya que envidian  tu gran valor, porque ellos serán incapaces de superarte en bondad, alegría, energía, talento o cualesquier clase de actitud!

No discutir con necios o ignorantes, el mismo Shakespeare, nos decía: “Hablar con ignorantes es como aventarles margaritas a los cerdos…” Por lo tanto, no tiene caso el perder nuestro valioso tiempo en cualquier animal…

Hoy iniciamos un nuevo año, una nueva forma de vida, un nuevo amanecer… ¡Porque cada uno de los que hemos vivido, han sido completamente diferentes!…

Si iniciamos hoy, al final de este año, tal vez lograremos todos nuestros objetivos:

Primero seremos disciplinados, nos aceptaremos cada día procurando ser mejores. Nunca olvidar que la puntualidad sea parte de nuestra forma de ser. Jamás trataremos de actuar como joven libertino, más sólo para dar placer al cuerpo, sin amor, ni respeto por uno mismo(a), y  hacerlo porque, “todos lo hacen”… Recuerden, no somos “todos”, sólo seres únicos e irrepetibles… Más vale decir un “NO” a tiempo, que tener que matar a nuestro propio hijo(a), porque no está dentro de nuestros planes y estorba para futuro… Gracias a Dios nuestra madre no pensaba como los chicos modernos: sin amor, principios… ¡Sin entender el verdadero milagro de la vida!…

Como jóvenes no podremos evitar la pérdida de nuestra divina Patria, que hemos palpado cómo poco a poco nos la están arrebatando de las manos, convirtiéndonos en “esclavos globalizados”, a merced de extranjeros… Muchos traidores a nuestra Patria cuando tenían el poder… ¡vendieron a nuestro envidiado país al mejor postor!, diciéndonos que eran maravillosas fuentes de trabajo  en esta época de crisis…

Por eso suplico encarecidamente, seamos honestos, cabales, empleados responsables, autosuficientes, pero en pro de nuestra patria para salvar del caos en que esos traidores han planeado la estocada final de nuestro amado, pero muy vejado país… ¡Solo con honestidad, cabalidad y mucho amor lo lograremos!… Porque… ¡México es para los mexicanos!

                                                                                                                       Cariñosamente Ana I.