217 millones de personas viven con pérdida auditiva
El 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud, que este año impulsa el tema “Nuestro planeta, nuestra salud” a partir de una campaña que invita a personas, comunidades, gobiernos y organizaciones del mundo a compartir sus historias sobre las medidas que adoptan para proteger nuestro planeta y nuestra salud.
De ahí que el cuidado que tengamos con nuestro planeta será reflejo de bienestar y salud integral, poniendo especial atención al funcionamiento de los cinco sentidos. En el caso de la audición, datos recientes de la Organización Panamericana de la Salud[1] (PAHO por sus siglas en inglés), señalan que en la región de Américas existen alrededor de 217 millones de personas con pérdida auditiva, esto es el 21.52% de la población. La proyección para 2050 es que esta cifra aumente a 322 millones.
De acuerdo con expertos de MED-EL, a través de los sonidos, la audición nos conecta con todas las cosas que amamos en nuestro planeta. La parte sensorial del cuerpo se complementa entre sí, de ahí que tener un adecuado funcionamiento del oído está relacionado estrechamente con el desarrollo del lenguaje.
La Organización Mundial de la Salud[2] y la PAHO han señalado que más de 1000 millones de personas de entre los 12 y 35 años corren el riesgo de perder la audición debido a la exposición prolongada y excesiva a la música fuerte, uso inapropiado de dispositivos de audio personales, así como la exposición a niveles de sonido nocivo que pueden acarrear consecuencias devastadoras para la salud física, mental, educación y perspectivas de empleo.
“Las cifras de los organismos globales de salud son un importante indicador que nos permite cuantificar el daño y nos invita a realizar un análisis profundo sobre la necesidad de políticas públicas que generen soluciones determinantes, de última tecnología e innovadoras para mejorar la calidad de vida de las personas con problemas auditivos, de igual manera nos advierte de la importancia de promover una cultura de la detección oportuna” dijo Fernando Díaz, Director Comercial de MED-EL.
La innovación tecnológica incluye dispositivos como implantes cocleares, creados para personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda; la estimulación acústica combinada, para personas de sordera parcial; implantes de oído medio, para personas con pérdida auditiva neurosensorial de leve a severa o pérdida auditiva conductiva y mixta; implantes de conducción ósea, para personas con pérdida auditiva conductiva y pérdida auditiva mixta o sordera unilateral.
Disfrutar y escuchar las maravillas que ofrece el planeta con un cuerpo saludable es una necesidad humana, por lo que MED-EL se suma al Día Mundial de la Salud e invita a las personas con problemas auditivos a compartir sus historias de vida. Sumar testimonios permitirá abrir la conversación sobre la necesidad de estrategias que mejoren la vida de millones de personas con discapacidades auditivas.
Acerca de MED-EL
MED-EL, líder en soluciones auditivas, está impulsada por la misión de superar la pérdida auditiva como una barrera para la comunicación. La empresa privada con sede en Austria fue fundada por los pioneros de la industria Ingeborg y Erwin Hochmair, cuya investigación innovadora condujo al desarrollo del primer implante coclear multicanal (IC) microelectrónico del mundo, que se implantó con éxito en 1977 y fue la base de lo que hoy se conoce como el implante coclear moderno. Esto marcó un precedente para el crecimiento exitoso de la compañía en 1990. Hasta la fecha, MED-EL ha crecido a más de 2,300 empleados en todo el mundo y 30 oficinas directas.
La compañía ofrece la más amplia gama de soluciones implantables y no implantables para tratar todo tipo de pérdida auditiva, lo que permite a las personas en 134 países disfrutar del don de la audición con la ayuda de un dispositivo MED-EL. Las soluciones auditivas de MED-EL incluyen sistemas de implantes cocleares y de oído medio, un sistema combinado de implantes auditivos de estimulación electroacústica, implantes auditivos de tronco encefálico, así como dispositivos de conducción ósea quirúrgicos y no quirúrgicos