Coco: el homenaje de Pixar a la cultura mexicana
Por: Sebastián Hernández
El grande de la animación ha vuelto a las pantallas, y como es usual, los estudios Disney Pixar nos trae una aventura que disfrutarán desde los más chicos hasta los más grandes.
Coco nos cuenta la historia de Miguel, un niño de un pequeño pueblo mexicano, quien desea convertirse en un aclamado músico pese a la desaprobación de su familia, que, para su mala suerte, detesta la música y todo lo que tenga que ver con ella. Miguel decide robar una guitarra que perteneció a su tatarabuelo, la cual al ser tocada lo transporta a la tierra de los muertos en donde emprenderá un extraordinario viaje para volver a casa.
Visualmente esta cinta es impecable. A lo largo de toda la película se pueden apreciar detalles tan elaborados que no creo que hubieran sido posibles de realizar ni siquiera hace un año; tanto la iluminación, el diseño de personajes, los escenarios, y la animación en general son suficientemente impresionantes para dejar boquiabiertos hasta el más amargo espectador.
Otro esfuerzo que se debe aplaudir, es el de investigación y adaptación de la identidad mexicana en este filme. El equipo dirigido por Lee Unkrich (co-director de Toy Story 2, Buscando a Nemo, y Monsters Inc.) y Adrián Molina (artista de storyboard de Toy Story 3, y escritor de El Buen Dinosaurio) supo presentar con suma fidelidad a la familia mexicana tradicional y sus costumbres. A excepción de ciertos momentos y decisiones de escenografía (especialmente en las escenas de la Tierra de los Muertos), Coco respeta la mexicanidad en todos los elementos que la conforman.
La trama, aunque conmovedora y entretenida, no aporta nada nuevo y cae en ciertos lugares comunes. Su historia y desenlace parecieran ser extraídas de otras películas, al igual que el desarrollo de los personajes. Si somos lo bastante objetivos podemos asegurar que Coco no será un nuevo clásico de los estudios Pixar, pero sí una película que cumple con todo lo que se esperaba de ella y que sin duda será recordada por muchas generaciones.
Un filme que los mexicanos podemos apreciar por lo cercano a nuestra realidad, y el resto del mundo por su entrañable interpretación de las características que identifican a las familias de nuestro país.