Tu ropa en el trabajo debe ayudar, nunca perjudicar

Percepciones / Roberto Franco Briones / Consultoría en Imagen Pública ICONOS

Es importantísimo proyectar mediante nuestra vestimenta, nuestros conocimientos sobre la labor que desempeñamos

Una parte fundamental de la imagen profesional en una persona es estar consciente del lugar, la hora, el clima y el contexto en el que va a usar una prenda, pues es importantísimo proyectar mediante nuestra vestimenta, nuestros conocimientos sobre la labor que desempeñamos.

Pero no se confundan, esto no significa que todas las personas deban utilizar traje, significa que es recomendable que vistas según la profesión que tienes y el lugar en el que te encuentras. Es decir, si vives en Vallarta y te digo que necesitas ir de traje a una reunión a mediodía, inmediatamente pensarás que estoy loco y que el clima no te lo permite, pero si la reunión es con tu jefe en un clima templado como la Ciudad de México lo verías normal.

Existen códigos de vestimenta que nos permiten vernos formales en ambos lugares, en el templado como ya lo platicamos será el traje, en el cálido no pasaría nada si llegaras con una guayabera (blanca, manga larga y de lino) tipo presidencial.

Y de todas formas no es algo que todo mundo deba utilizar, existen profesiones que deben comunicar creatividad, otras, empatía y algunas más sobriedad. Sólo piénsenlo un poco, si ustedes tienen cita con un diseñador gráfico, ¿qué están esperando ver en él?, ¿le confiarían un trabajo creativo a una persona que proyecte demasiada sobriedad? ¡Normalmente no! Ustedes están esperando que tenga algo más, ya sea el peinado o los colores en la ropa, algo que le comunique originalidad.

Un abogado, un diseñador, un modelo y un geólogo van a vestir distinto, pues sus trabajos no van dirigidos a las mismas audiencias ni se desarrollan en los mismos lugares. ¡Imagínense a un geólogo trabajando a 40 grados en pleno campo! En definitiva tiene que ver el contexto y el lugar, pero en ninguno te deberías ver fachoso.

Lo mismo sucede en una oficina, vestir bien es vestir con propiedad sin perder tu propia personalidad, no tiene nada de malo que te guste mostrar tu cuerpo o quieras agregarle a tus prendas algo más vistoso, siempre y cuando no distraiga de lo realmente importante, tus capacidades.

¡No te vayas a los extremos, relájate y relaja tus prendas! Recuerda que la clave de todo está en la sencillez.

Roberto Franco Briones

Consultoría en Imagen Pública ICONOS

Tel. (55) 6360 4389

www.consultoriaiconos.com