Talento a bordo
Letras Sahumerias / Por M en E Marisú Ramírez Muñoz
En el quehacer político, existen cuestiones sociales de suma importancia que no pueden ser dejadas de lado y simular que no pasa nada. Es verdad, existen enormes flagelos sociales en diversas áreas, pero una de las más urgentes en nuestro municipio es sin lugar a duda el “Transporte Público”.
Sobre este tema en particular, se puede leer en las noticias que las autoridades están tomando cartas en el asunto, pero en la realidad subyacente de los usuarios no se ve reflejada, sino que, al contrario, cada día pervive un brutal retroceso.
Son las dos de la tarde en el centro del Pitillal, con una sensación térmica de 35 grados y una humedad de hasta 75 por ciento. Ruta: Pitillal-Ixtapa al menos treinta minutos de espera, a empujones subimos alrededor de 20 personas en una unidad ya sin cupo disponible. Una señora grita desesperada ¡Suben! Y a empujones lo logra. El chofer con cara de angustia y con celular en mano se comunica con su superior y le comenta que el camión viene fallando.
Desde ahí hasta el Palmar de Aramara, en cada esquina había al menos entre cinco y diez personas a las cuales el conductor no pudo brindar servicio, lo que se traduce en otros treinta minutos de espera en el rayo del sol –inhumano desde donde se le mire-. Todo ello sin contar que los que veníamos a bordo de la sauna-unidad teníamos temor que el conductor nos dijera “Hasta aquí llegó el camión por que viene fallando”.
Se podrían describir infinidad de historias urbanas al respecto, pero cada persona lo vive desde su propia realidad y condición social. Lo que está generando que el parque vehicular se incremente sobremanera, lo cual se puede constatar en horas pico. La necesidad de movilidad urbana es tanta que algunas personas están optando por otros medios de transporte como las motocicletas, bicicletas y hasta patinetas y patines eléctricos; sin importar lo peligrosos que resultan estos tipos de transportes, las estadísticas no mienten, cada día se registran infinidad de accidentes fatales de automotores de dos ruedas.
Lo anterior, sin contar las interminables esperas de rutas irregulares como la “Guadalupe Victoria” o el “Infonavit” donde con reloj en mano he esperado para abordar una unidad en el centro de Puerto Vallarta hasta por dos horas. Sin exagerar.
Por ello, algunas empresas turísticas de la región desde hace algunos años, han optado por contratar servicios particulares alternos para el transporte de su personal, donde cada día es más común leer en los autobuses “Talento a bordo” para garantizar que su personal este “a tiempo” para brindar servicios de calidad.
También es importante señalar que los únicos que se están enriqueciendo con esta situación son los dueños de las plataformas de modelos de gestión de transporte particular independiente al servicio público, donde cada día las tarifas se incrementan sobremanera, por la amplia demanda de usuarios que requieren movilizarse.
Sobre este tema en particular, se podrían describir infinidad de anécdotas, pero el espacio aquí es muy breve. Pero lo que no debe ser breve es hacer un llamado urgente a todos los niveles de gobierno, en especial a @Alfaro para que esta situación del transporte público vallartense sea subsanado a la brevedad.
La sociedad brinda su voto de confianza a las autoridades para que mejoren su calidad de vida y no al contrario. Es menester reflexionar al respecto. Una sociedad no merece ser tratada de esta manera, no sólo en temas de movilidad urbana, sino también en otras áreas, como la de servicios médicos, servicios públicos, y otros tantos que requieren acciones urgentes. http://letrassahumerias.blogspot.com/