¿Quién es Marcelo Ebrard?
Hablemos en serio / Javier Orozco Alvarado / Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Marcelo Ebrard es el hombre, el político, y el funcionario público que lleva 40 años de trayectoria sirviendo a México en las más difíciles circunstancias; desde su participación en el rescate de damnificados por el terremoto de 1985, hasta su gran esfuerzo por conseguir urgentemente las vacunas para el Covid-19 en China, Europa, Rusia y Estados Unidos, para salvar al pueblo de México de la pandemia.
Él conoce bien la historia económica y política de México a partir de su propia experiencia; desde sus primeros empleos en el gobierno, hasta su firme postura frente a Donald Trump en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ahora conocido como T-MEC. Por eso conoce más que nadie las consecuencias económicas y sociales del modelo neoliberal.
Durante su gestión como jefe de gobierno entre 2006-2012, instrumentó políticas e iniciativas en favor de los habitantes de la Ciudad de México, lo que le valió el reconocimiento de la ciudad del futuro y ser considerado como el Mejor Alcalde del Mundo.
Marcelo Ebrard se ha preparado para ser presidente de la república, no sólo porque ha luchado muy de cerca al lado del presidente Andrés Manuel, sino porque ha sido su más leal y eficiente colaborador a lo largo de casi cuatro décadas.
Por eso, en su desempeño como Secretario de Relaciones Exteriores, en enero de 2022, fue reconocido por la Asociación de Control de Armas de Estados Unidos como el “Hombre del Año” por su infatigable lucha para frenar el tráfico de armas a México. Además, recientemente le fue otorgado el Doctorado Honoris Causa por parte del INAP, en reconocimiento a su trayectoria como administrador y servidor público.
Marcelo Ebrard está convencido que México está destinado a la grandeza. Es el único que tiene una propuesta de seguridad para todos con el Plan Ángel; es quien propone programas para mejorar las condiciones de vida para la mujer, mejorar la educación, la salud, elevar el nivel de bienestar de la población y consolidar los programas sociales.
En la parte económica, plantea la necesidad de la autosuficiencia energética, modernizar la infraestructura ferroviaria, la infraestructura fronteriza, consolidar el corredor transístmico, atraer inversiones hacia el sureste de México, acrecentar los ingresos de los trabajadores para combatir la pobreza y convertirnos en un país de clases medias. Su meta es lograr un crecimiento del 5% del PIB en los próximos años.
Quienes simpatizan con la cultura de la sumisión, el culto a los cacicazgos y el caudillismo, quieren verlo fuera de Morena porque es el único precandidato que tiene una propuesta para la continuidad con cambio en favor del progreso de México y la unidad de todos los mexicanos. Porque es el más preparado y ha estado en contra de los gastos excesivos en carteles, espectaculares, pinta de bardas, uso de recursos públicos federales e intervención de gobernadores y alcaldes en el acarreo de personas en favor de otras precandidaturas; violando el principio de equidad y austeridad a la que se comprometieron todas las llamadas “corcholatas”.