“Le apunté a la Luna y le atiné a una estrella”

Liam es un joven vallartense de buena vibra, enamorado de la música. Ha llevado sus sueños a la realidad gracias a una voluntad inquebrantable que le ha permitido compartir su arte como DJ en todo el mundo, generando una empatía sin igual a través de sus mezclas y ganándose el reconocimiento internacional.

Criado en la colonia 5 de Diciembre, Liam ha dado el paso de interpretar a crear su propia música. Muestra de ello es su más reciente lanzamiento, Bocafé, en el que busca compartir su esencia. En esta entrevista, Liam narra todo el camino recorrido.

¿Cómo llegó la música a cautivarte?

La música ha estado conmigo desde que tengo memoria. Desde hechos en la infancia que me han marcado, y que al escuchar ciertas canciones detonan esos recuerdos, hasta mi adolescencia, a los 14-15 años, cuando decidí adentrarme más en la música, como DJ en las fiestas de mis amigos, usando solo el iPod. En ese entonces no había Spotify ni plataformas, solo descargábamos canciones de donde se pudiera. De ahí partió mi interés, hasta el punto en que me fui a estudiar Ingeniería en Audio y Producción Musical a Estados Unidos. Estuve cinco años en Los Ángeles y, ya de regreso aquí en Puerto Vallarta, haciendo todo el ruido posible con la música.

¿Tienes influencia musical de la familia?

Tengo la fortuna de venir de una familia de músicos, de mariacheros, de trombonistas, todos aprendiendo por sí solos. Mi familia viene de Talpa, Oaxaca y Acapulco, y todos han sido músicos empíricos. De alguna manera, está en mi sangre. Pero sí, el sentimiento de escape que da la música es algo que me ha marcado toda mi vida.

¿Cómo ves la música?

Es mi todo, de muchas maneras. Es una manera de conectar conmigo mismo y con más personas. Es algo en común que todos compartimos. El poder tener ese don, ese regalo, cuando ves a niños de 4 o 5 años que se sientan al piano y parecen descendientes de Beethoven, es increíble. Pero al final de cuentas, la música es mi todo.

¿La música te ha permitido vivir de lo que te apasiona?

Sí, es un regalo del que estoy agradecido todos los días.

¿Hasta dónde te ha llevado esta pasión por la música?

He tenido la suerte de poder compartir mi música en diferentes partes del mundo, desde Europa hasta giras en Estados Unidos. En 2022, Monolink me llevó con él para abrir su gira mundial. En marzo estuvimos en Australia, en ciudades como Melbourne y Sídney. El año pasado, y también en 2017, tuve la fortuna de estar en Europa compartiendo con diferentes artistas. Estoy muy agradecido y bendecido de poder estar donde quiera que haya alguien que quiera escucharme.

¿En qué momento un patasalada egresado del Angloamericano dio su paso al mundo?

Cuando estuve estudiando fuera, toqué todas las puertas que pude, tanto con artistas que admiraba. Aunque fuera un sueño mandarles un mensaje y que alguien me contestara, desde ahí nunca bajé la guardia y siempre estuve muy seguro de lo que quería hacer. Por ahí del 2018-2019, el proyecto despegó más formalmente, con presentaciones a nivel nacional e internacional. Mucho de mi mercado ha sido en Estados Unidos, y he tenido la fortuna de tener promotores y oyentes que buscan el proyecto de Liam Fitzgerald. Darme cuenta de que hay gente allá afuera que quiere escucharme es increíble.

¿Estabas seguro de a dónde querías llegar con tu música?

Le apunté a la Luna y le atiné a una estrella. Fui muy aferrado al sueño, hasta ganas de llorar me dan de recordar, pero aferrado al sueño de hacer una diferencia con la música en mi vida. No pensé en cómo ni a dónde, no hay un manual para esto. Fue a prueba y error, aprendiendo de todas las oportunidades, tanto positivas como negativas. Así es esto, oportunidades que igual no salieron como yo quería, pero definitivamente se aprende de ellas. Y seguimos siendo prueba y error; todavía no está marcado el camino, todavía no sé a dónde va a terminar esto, pero eso es lo padre de esta aventura. Al final del día, con toda la felicidad y el amor hacia lo que hago, esa es la gasolina del motor.

¿Cómo te ves en 10 años?

Definitivamente, viviendo el momento, pero me veo compartiendo escenario con artistas grandes, en giras mundiales propias. El proyecto ahora es sacar más música para que la gente pueda escuchar no solo cuando toco como DJ, sino también mis propias canciones. Ganar Grammys siempre ha sido un sueño para mí, para que mis papás tengan uno en su repisa dedicado a ellos. Pero en 10 años, viviendo el momento y disfrutando cada paso de esta aventura.

¿Cómo te autodefines, eres un hombre espiritual?

Sí, muy espiritual. Rezo, tengo varias creencias, no puedo decir que estoy en una sola religión, pero sí soy muy espiritual.

¿Qué es lo que le quieres dar a la gente con tu música y en qué género?

Entre los géneros, yo creo que el house, el afro house, que es la tendencia ahora. Llevo amarrado a ese género desde que regresé a Puerto Vallarta. En Los Ángeles, tocaba diferentes géneros en fiestas, hasta que encontré mi sonido en las percusiones y vocales afrolatinas, junto con la música electrónica, el house y el techno. Ahí encontré mi sonido y empecé a producir. Tocar música de alguien más me encanta, pero quiero compartir lo que proyecto y recibo de la música que alguien más crea. Quiero inspirar a otros a inspirar grandeza y, al mismo tiempo, inspirarme a mí mismo a ser mejor, a crecer como persona y como humano. Esa ha sido siempre la finalidad de la música, y con este nuevo track de Bocafé, que hice con Lau, es una canción de ruptura amorosa, de sobrepasar eso, de extrañar a alguien. Igual nadie lo tomará de esa manera, pero en lo que ellos transformen esa emoción, quiero que les cree algún sentimiento, que les mueva algo dentro de ellos. Esa es mi finalidad con la música.

No puedo sentarme a explicarle a cada persona que escucha mi canción por qué la hice, qué significa. Pero eso es lo bonito de la música, que cada quien puede darle la interpretación que quiera. Al final del día, estamos vivos porque sentimos, y la verdad es que este proyecto de no solo tocar música de alguien más, sino de crear música para mí, es un regalo. Poder vivir de esto, apoyar a mi familia, ser autosuficiente, es el regalo más grande que tengo en la vida.

¿Qué formación musical tienes?

Desde la secundaria y prepa, tenía muy enraizado que quería estudiar música. Mis papás, especialmente mi mamá, me apoyaron, pero me dijeron que demostrara que no era solo una etapa. Me metí a clases de piano y a cursos en línea de producción, y eventualmente encontré una escuela fuera de México que se dedicaba a enseñar producción musical, ingeniería en audio, mezcla, masterización, diseño de sonido. Crear música es parte fundamental de mi vida y de mi día a día.

¿Qué lección de vida te han dejado tus papás?

Creértelo, definir quién eres y que todo en esta vida es tangible. Si te esmeras en trabajar duro y hacer las cosas bien, más que nada, y obrar bien, el que obra bien, le va bien. Al regresar a Puerto Vallarta, he trabajado con diferentes artistas más jóvenes que yo. Así como yo toqué puertas, ellos también lo hacen, y eso ha sido súper gratificante, poder pavimentar un camino para que otras generaciones puedan ir a 100 km por hora.

Ahorita hay un boom artístico y musical en Vallarta en diferentes géneros, como rap, reggaetón, música electrónica e indie. He podido influenciar un poquito a las generaciones que vienen con lo que yo he aprendido.

¿No estás peleado con la idea de compartir?

No, al contrario. De chavo, preguntar a diferentes DJs locales y que te cerraran las puertas y te minimizaran, me aferró todavía más. Eso es motivación para mí. Ahora, ni siquiera lo pienso. Mi visión se ha convertido en algo estratosférico. Mi sueño es estar de gira 250 días del año, tocando en todos los continentes. Compartir es algo muy bonito, poder decir que inspiré a alguien. Al final del día, es algo que quiero lograr con la gente de Vallarta, con los chavos y la gente grande. Nunca es tarde para empezar. Se pueden lograr cosas increíbles trabajando duro y siendo persistente.

Háblame de Bocafé

La canción es una mezcla de bolero, deep house francés y otros géneros que se pueden escuchar o sentir, además de la increíble voz de Laura. Estoy muy emocionado porque la sigan escuchando y sonando. Creo que hará mucho ruido a nivel nacional este verano. La estamos posicionando en diferentes playlists y spotlights, y va a tener mucho movimiento. Bocafé marca un momento en mi vida que fue emocionalmente doloroso, pero creo que eso se transmite en la canción. Espero que alguien diga que es una canción bonita y reciba algo más positivo que los sentimientos tristes. Estamos muy felices y contentos con el resultado.