La tradición entre fuego y copas
El tercer sábado de agosto se conmemora el Día del Parrillero, una celebración que rinde homenaje a la tradición de cocinar alimentos a la parrilla, especialmente carnes, en un entorno social y festivo. La parrillada es una práctica muy arraigada en distintas culturas, donde amigos y familiares se reúnen alrededor de una parrilla al aire libre para disfrutar y compartir comidas deliciosas y momentos de convivencia.
El origen exacto del Día del Parrillero puede variar según la región y la cultura, pero en general, la idea detrás de esta celebración es honrar la habilidad y la pasión de aquellos que dominan el arte de la parrilla, así como promover la camaradería y una buena comida al aire libre. A medida que la cultura de la parrillada se ha expandido y globalizado, cada vez más países y comunidades adoptan esta festividad para celebrar la comida y la amistad en un ambiente relajado.
Los vinos y los cortes de carne son conocidos por complementarse de la mejor forma, y sin duda se han vuelto el maridaje más popular, gracias a que detrás de esta gran combinación se esconde un sinfín de sensaciones, aromas y sabores que despiertan todos los sentidos.
La elección de un buen vino puede elevar significativamente la experiencia de una parrillada. Los vinos de Trivento son conocidos por su calidad y versatilidad, convirtiéndolos en una excelente opción para acompañar una variedad de platillos a la parrilla. Un vino infalible para estas ocasiones, sin duda es Trivento Reserve Malbec. Su color rojo intenso con matices violáceos y azulados, hace que este Malbec se destaque por sus notas aromáticas de cerezas, frutillas y frambuesas con delicados toques de vainilla y coco provenientes del roble. Es un vino equilibrado, de taninos dulces que brinda un final aterciopelado.
Si buscas una experiencia a la parrilla más gourmet, Trivento Golden Reserve, el tesoro mejor guardado de Luján de Cuyo que forma parte de la línea premium de la bodega argentina, es la mejor opción. Este vino es una mezcla suave y con cuerpo, con notas de bayas oscuras y especias, que dan como resultado una textura aterciopelada y una acidez equilibrada; ideal para acompañar cortes de carne a la parrilla como bife de chorizo o picaña, así como queso provoleta ahumado. Este Día del Parrillero es un gran momento para celebrar a aquellos que reciben y atienden a sus invitados deleitando con su inigualable sazón; a quienes crean lazos con amigos y familia a través del fuego.