“Es la historia del Atlas contada por sus jugadores”

Alejandro Aquino: Historiador, músico y escritor

Deshojando Margaritas, Historias Rojinegras de Alejandro Aquino

Deshojando Margaritas

La historia del Atlas desde la perspectiva de los jugadores, anécdotas, situaciones, hechos históricos y una amplia y rica narración de los orígenes de este equipo jalisciense, es la que Alejandro Aquino plasma en “Deshojando margaritas, historias rojinegras”, la cuarta obra literaria de este talentoso escritor, quien tiene en su haber una novela, “Constanza Ayer”, “Dicen qué pasa la vida soñando, apuntes sobre la vida del músico Rubén Fuentes”, y otro libro sobre un personaje destacado de las Chivas, “Balcázar, bendito futbol.”

En entrevista habla sobre este libro que le llevó dos años de investigación, y que incluso antes de su presentación por la pandemia, ya ha tenido una importante respuesta de parte del público que puede acceder a él a través de sus redes sociales alejandroaquino x-kantina.

¿Por qué elegiste el futbol como tema?

El futbol siempre ha sido para mí una pasión, pero por momentos uno tiene que decir que es un gusto culposo, porque en determinados círculos literarios siempre al futbol se le ve como una cuestión populachera,  y yo siempre he defendido que no es así, tiene un arraigo social importante, ha habido intentos en el mundo literario por acercarse al futbol de otra forma, tenemos a Mempo Giardinelli, a Eduardo Galeano, más reciente a Juan Villoro que se acercan muchísimo al futbol, y este libro surge a raíz del libro anterior, el libro “Balcázar, bendito futbol”, es un libro que habla sobre la vida del jugador de Guadalajara, Tomás Balcázar que en paz descanse, que recientemente falleció, lamentablemente los jóvenes solo lo ubican por ser el abuelo de Javier Hernández, el Chicharito, pero Tomás Balcázar era toda una institución, y ese libro surgió a raíz del libro de Rubén Fuentes, dado que Rubén Fuentes es amigo de Tomás Balcázar, entonces me invitan, yo lo escribo.

Balcázar…

Tomás Balcázar es del mismo barrio que mi familia, Mexicaltzingo, teníamos ciertas amistades cruzadas y me interesaba escribir sobre el futbol de una forma más humana, o sea, cómo es un jugador, y sobre todo en una época en la que el profesionalismo no estaba no estaba desarrollado, para jugar futbol había que tener también otros oficios, pero había un pequeño detalle, ese libro salió y había una presión no solamente de mis amigos, sino también una presión moral, porque yo no le voy al Guadalajara, yo soy rojinegro, y me di cuenta que se acercaba el momento en que iba a cumplir 40 años de irle a ese equipo, porque yo tenía 7, 8 años cuando mi padre me llevó al estadio Jalisco, y vilmente me engañó, me dijo que era un equipo triunfador, yo me la creí, todavía me la sigo creyendo, y yo me encontraba con el reto de qué escribir, cómo escribir sobre un equipo que tiene una historia muy rica, pero no en triunfos, no en guerras ganadas, sino en una que otra batalla.

Originalmente empecé a hacer como la contraparte de Balcázar, me dediqué a hacerle un libro a Alfredo el “Pistache” Torres, jugador y entrenador que llegó al Atlas en el 52 una historia muy similar a la de Tomás Balcázar, pero de pronto fui contactando más personas hasta que en total tenía 66 testimonios, de los cuales muchos de ellos eran hijos  y nietos de los fundadores del equipo de 1916, entonces poco a poco empezaron a llegar historias.

Desde el origen…

Es un libro que al que le guste la literatura le va a gustar, al que le guste el futbol le va a gustar, independientemente que no le vaya al Atlas, y al que le vaya al Atlas, le va a encantar, al que le guste el Atlas de moda, no le va a gustar nada, porque es un libro de 480 páginas, de las cuales más de 300 son solo palabras, hay muchísimas fotos, cerca de 300 fotos muchas de las cuales son inéditas, pero es un libro de anécdotas, es la historia del Atlas contada por sus jugadores, y el hilo conductor es la vida de Juan José Lico Cortina un joven hijo de españoles y de amequenses, de aquí de Ameca Jalisco, del cual surge la idea de formar este equipo de futbol, entonces se va contando su vida, es una vida muy peculiar, es un tipo que era fanático del futbol, de la tauromaquia, del automovilismo, tenía una gran fortuna, la tiro a la borda, pero disfrutó muchísimo la vida, y su vida se va entretejiendo con otros jugadores del Atlas a través del tiempo, el de los años 20s, 30s, 40s, 50s hasta llegar al 2017, en el libro hay un narrador ficticio, Rafael Almaraz, el Chango, al que le guste el futbol y vaya al estadio Jalisco, pues saben que fue la voz oficial del estadio durante 50 años, también él colabora con un testimonio, entonces se hace este juego, como si Don Rafael en el momento en que deja de trabajar en el estadio, recuerda la historia del Atlas.

¿Cómo se recuerda?

Pues no solamente vamos a recordar partidos míticos, sino situaciones que los  aficionados no conocen, por ejemplo en los años setentas en que el equipo no tenía dinero, algún viaje a Coatzacoalcos donde el autobús se descompone y acaban todos pernoctando en un motel, y luego llegan y el estadio es de béisbol y tienen que jugar ahí, situaciones bastante cómicas que están muy alejadas del futbol profesional en la actualidad, porque estamos hablando de jugadores que ganaban muy poco y no es tanto el rollo que ahora se maneja del amor a la camiseta, sino que era la moda del futbol como tal, y otro elemento agregado al libro es la infancia como el vínculo que se tiene con el futbol, a mí a veces cuando me preguntan, “¿Oye y por qué le sigues yendo al Atlas si no gana nada?”, pues porque es mi vínculo con mi infancia, y en parte es un libro muy irónico porque se cuenta todo, por ejemplo hay un capítulo que a mí en lo personal me gusta mucho, que es el Capítulo 1076, no porque haya 1076 capítulos, sino porque fueron 1076 minutos que el Atlas dejó la portería en blanco, es el mayor record que existe en el futbol mexicano, 13 partidos seguidos sin meter un solo gol, entonces tengo los testimonios de estos jugadores de la temporada 80-81, de la desesperación de no poder marcar un gol, ir a la Basílica, pedirle a la virgen, llevar un chamán, y miles de cosas en el estadio para ver si podían meter un gol.

Te metiste hasta las entrañas…

Sí, la verdad es que hay muchos secretos, muchas cosas contadas que quizá los aficionados no sabían, y sobre todo en la cuestión del origen del equipo, porque  un punto importante de los capítulos es mostrar que este mito que siempre se ha manejado de que el Guadalajara es el equipo del pueblo y el Atlas el equipo de ricos, pues en el origen fue así, los primeros once jugadores provienen de familias que tenían tiendas de ropa, tenían fábricas textiles, tenían ingenios, o sea, la economía del estado estaba realmente movida por ellos, y pues también la forma en que se veían las formas en aquel tiempo, aquel tiempo en el que no había Whatsapp, no había teléfono, la vida era más lenta, y en este libro se refleja, son 480 páginas que vamos a ir repasando como si fuera una novela histórica.

¿Por qué el título?

Hace alusión al apodo original del Atlas, que no son los Zorros, son las Margaritas, explicamos todas las teorías del por qué se llaman Margaritas, una de ellas es porque la esposa del fundador se llama Margarita, y esta imagen que siempre tenemos de deshojar margaritas, esta ocasión, esta temporada va a ser la buena, pues viene recreada aquí, obviamente la gente joven dice ¿por qué deshojando margaritas?, ¿se está burlando el mismo tipo?, no, realmente los del Guadalajara quizás lo puedan tomar como una aceptación a las bromas, aunque realmente los de las Chivas hablan despectivamente y dicen “Márgaras”, no dicen margaritas, y bueno, es un libro que al que le guste el futbol, pero sobre todo a los que les guste la historia de la ciudad de Guadalajara, lo van a disfrutar muchísimo,

¿También involucras historia de la ciudad?

Sí, totalmente, no se puede contar la historia de un equipo longevo, y sobre todo las vidas de los personajes, si no estamos contando el contexto, desde el primer estadio donde van a jugar, que es su club, en el Paradero, que ahorita si alguien conoce esa zona de Guadalajara, que es Boulevard Marcelino García Barragán, no te vas a imaginar que hace cien años era una bosque de eucaliptos, y era una zona para los ricos, iban de vacaciones, ahora es una zona densamente poblada, popular, ni siquiera el club se encuentra ahí, entonces todo ese tipo de elementos a la gente le van a servir para transportarse, es como crear una película del equipo, desde cómo se consiguen los primeros balones, cómo se consiguieron los primeros uniformes, quién fue el primer presidente, el primer viaje que hicieron fuera de Guadalajara, cómo lo hicieron, hechos raros que han sucedido en la cancha, desde asesinatos, muertes en el estadio por algún paro cardiaco, rivalidades, todas estas cosas que nos gusta a la gente ocurrente, yo lo que les puedo avisar es que si no les gusta el Atlas, si no les  gusta el futbol, este libro lo van a disfrutar mucho y van a tener muchos temas de conversación en velorios, en reuniones sociales, porque realmente hay muchísima anécdotas muy buenas.

¿Cuántas personas en total entrevistaste?

De los exjugadores y descendientes sólo 66, hay cerca de otras 40 personas que no fueron exactamente futbolistas, que trabajaron en el club, que también me aportaron cosas, es un libro que trata de hacer justicia a todos, por ejemplo ahí se habla de los masajistas que han trabajado ahí, de los doctores, personajes que la afición recuerda, y podemos decir que en general fueron unas cien personas.

¿Qué fue lo más complicado del libro?

Lo más complicado fue hablar del equipo Atlas en los últimos diez o doce años, eso fue lo más difícil porque realmente hay poco qué contar, no solamente porque el equipo lleva una época bastante mala, prácticamente desde que se va el lío de Televisión Azteca el equipo pues perdió su identidad, antes se perdía pero daban un espectáculo, ahora en 20 minutos la gente se quiere ir del estado por lo mal que juegan, pero no solamente eso fue lo difícil, lo difícil es que no solamente el equipo esté mal en los últimos doce años, sino que también la vida ha cambiado, antes había jugadores que duraban muchos años en el club, se identificaban con los colores, ahora cada temporada cambian prácticamente de equipo, entonces no hay un jugador que tenga un arraigo, y también hay una cuestión cultural muy importante, los testimonios de los jugadores más jóvenes carecen de toda esta picardía que tienen los jugadores de los ochentas para atrás, porque ahora los jugadores son de alto rendimiento, y por ejemplo en los ochentas el Atlas entrenaba tres días a la semana, lo que te implica que los jugadores tenían vida, en la actualidad los jugadores son unos atletas, entrenan todos los días, están totalmente dedicados a ello, entonces obviamente tienen muchas carencias en otros aspectos, no puedo decir que no tienen cultura, la tienen distinta, pero la forma de ver la vida es muy distinta.

Alejandro Aquino cuenta con tres interesantes obras en su haber.