Jóvenes emprendedores
¿Qué tan difícil es para un joven iniciar un negocio o empresa?
Cuando tengas una buena idea, que se vea como una posibilidad en el futuro, no dejes que se desvanezca.
Juventud en nuestra comunidad
“Uno de los grandes errores que comete la gente es tratar de forzar su interés. Tú no eliges tus pasiones; tus pasiones te eligen a ti”
Jeff Bezos
La edad es uno de esos factores vitales que es necesario considerar al tener alguna idea o plan, ya sea para divertirse o realizar un sueño que tengas, tal vez las ansias de ir a un lugar o diferentes cosas. Tenemos en la cabeza ese pensamiento de ¨Si tuviera diez años más¨ o también aplica el ¨Si tuviera diez años menos¨. Nunca parecemos estar conformes con nuestra edad, y el año donde simplemente nos tocó vivir, siempre somos o muy jóvenes, o muy viejos para hacer algo que queremos, no podemos cambiarlo ni hacer algo al respecto.
En mi caso soy muy joven para la mayoría de las cosas, ya que para las que soy viejo se limitan a subirme a juegos en restaurantes o comer papilla de verduras para bebé y cosas por el estilo. Regresando a mi punto, ¿Por qué los chavos que se sienten listos para muchas cosas, simplemente no se les toman seriamente? Hoy en específico me gustaría hablar del concepto de cómo se juzga a la juventud, cuando por ejemplo, queremos iniciar un negocio, tenemos algún tipo de idea que busca nada más que el bien, empezar a emprender para buscar algún tipo de independencia económica. ¿Qué tan difícil es para un joven iniciar un negocio o empresa?
Es cierto, existen muchas cosas que nos detienen como jóvenes para avanzar en un mundo empresarial, que existen más cosas que nos privan que las que nos impulsan. Simplemente los prejuicios de cómo por no ser mayor de edad, ya eres inexperto, inmaduro, inconsciente y posiblemente solo problemas. He tenido la oportunidad de escuchar de conocidos y amigos, cómo ha sido su experiencia para empezar algo que soñaron desde hace mucho tiempo, empezar algún tipo de negocio o desarrollar una idea. Tenían diferentes razones, unos querían seguir una pasión, otros querían dejar de depender del dinero de sus padres, pero algo que tenían en común era que contaban una idea valiosa.
¿Cuáles fueron sus problemas más grandes?
Estos serían, entre los que acabo de mencionar, y el hecho de que para dar de alta una marca o algún negocio en hacienda, necesitas la mayoría de edad, la cual se cumple a los dieciocho años. Otro problema muy grande, es que para desarrollar una idea se necesita inversión, dinero que te servirá para hacer realidad tu idea de negocio o servicio. Aquí existen pocos escenarios posibles, ya que no tenemos la mayoría de edad para pedir un préstamo al banco, la otra opción sería pedirles dinero a tus padres para empezar a emprender, ¿pero qué si no tenemos ninguna de las dos opciones? Pues entonces el panorama se ve cada vez más difícil de superar.
Desde mi punto de vista, esto lo veo injusto y un poco frustrante. Hoy en día el planeta está conectado y los que más saben de esto son las masas de pequeños adultos. Sabemos lo que se usa y lo que no, lo que podría ser negocio y lo que nunca lo será.
De las cosas que más me llamaron la atención, fue cuando mencionaron la clave para empezar esta visión empresarial, fue que simplemente es necesario ser muy persiste, tener que estar comprometido con tu idea y con lo que desees hacer, tener una visión y un plan, porque de otra manera será imposible lograr algo importante. Yo quiero lograr algo importante, creo tener un plan, pero sobretodo una meta, un propósito, y eso también es muy valioso. Saber por qué quieres hacer lo que quieres hacer y qué buscas. Las motivaciones pueden ser muchas, no sólo económicas, hacer de donde vivamos un lugar mejor no es sólo algo que se quiere, es un deber.
Recordar, cuando tengamos una buena idea, que se vea como una posibilidad en el futuro, no dejes que se desvanezca porque parezca complicada, al contrario, es tu idea, los inventos y negocios los cuales manejan el mundo no los crearon personas que no se atrevieron a tomar riesgos. Una idea alocada no es una idea mala, sólo significa que no sabremos si funcionará si no lo intentamos y nos comprometemos. Al mundo le hacen falta personas dispuestas a hacer realidad sus ideas. En mi caso, me motivó escuchar a estos jóvenes que compartieron sus experiencias, sus retos y dificultades, y sólo me hizo darme cuenta que porque sea difícil, en serio, en serio no es imposible. Muchas gracias por leer y que tenga un excelente día.