Inteligencia emocional, un camino por recorrer para las empresas
- En 2020, la inteligencia emocional será una de las 10 competencias más importantes para la vida laboral
De acuerdo al estudio Global Workplace Trends 2018 realizado por Sodexo, la inteligencia emocional (IE) se ha convertido en un conjunto de habilidades básicas para las organizaciones y líderes de alto rendimiento. El lugar de trabajo en sí mismo puede ser un espacio emocionalmente inteligente, al permitir que las personas pongan a trabajar sus sentimientos, y al alinear sus necesidades y motivaciones humanas fundamentales.
La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, así como manejar las emociones de manera efectiva. De acuerdo con David Goleman, psicólogo estadounidense, el IQ tradicional (inteligencia intelectual) sólo representa el 20% del éxito profesional de una persona, mientras que el 80% restante está determinado, en gran medida, por la capacidad de gestionar sus emociones.
Existen cuatro esferas que rigen la inteligencia emocional:
- Autoconciencia: saber lo que sentimos y por qué lo estamos sintiendo.
- Autogestión: se refiere a la capacidad de manejar emociones angustiantes y organizar las que son positivas.
- Conciencia social: reconocer y empatizar con las emociones de otras personas.
- Gestión de relaciones: trabajar efectivamente con otros, desde la resolución de conflictos hasta la inspiración y la motivación.
Estas esferas afectan el rendimiento de una empresa de manera directa, estudios demuestran que: las personas y los líderes que manejan con eficacia sus emociones se recuperan más rápido del estrés en el lugar de trabajo o que la capacidad de un líder para ser empático mantiene una correlación con la rentabilidad y la productividad.
En una investigación realizada por una aseguradora estadounidense, se encontró que los vendedores de reciente ingreso a la compañía eran más optimistas que los que ya llevaban algún tiempo trabajando en su empresa. En contraste, los primeros vendieron unos 37% más seguros en sus dos primeros años que el segundo grupo.
De acuerdo al World Economic Forum, para 2010, la IE será una de las 10 competencias más importantes para la vida laboral, es por ello que muchas organizaciones han implementado una variedad de estrategias para impulsar su desarrollo.
Roxana Aguirre, directora de Gestión Humana de Sodexo Beneficios e Incentivos México, empresa líder en servicios de Calidad de Vida, recomienda potencializar la IE a través de las siguientes acciones en el ciclo de los colaboradores en la empresa:
- Contratación: La IE debe ser una parte integral de cada buena decisión de contratación, para aumentar la IE global de una organización.
- Evaluación: como un primer paso, realizar una evaluación de la IE a los empleados es un paso clave para comprender dónde están situados y, en consecuencia, actuar conforme a los resultados del diagnóstico y obtener un progreso organizacional para mejorar.
- Capacitaciones: Los talleres o cursos de IE pueden ayudar a los empleados a manejar emociones negativas y situaciones desafiantes, tales como comentarios críticos, conflictos y decisiones impopulares, lo que contribuye a mejorar la productividad y ambiente de la empresa.
- Programas de bienestar: Las empresas con visión de futuro reflexionan sobre las motivaciones fundamentales de los trabajadores para crear valor, a partir de programas de bienestar y estrategias de reconocimiento y recompensa. Con miras a satisfacer las variadas necesidades y preferencias que pueden tener los colaboradores de una organización, para este concepto Sodexo ofrece Premium Pass, monedero electrónico con el que se pueden comprar en diversos establecimientos, funcionando como un incentivo que beneficia la calidad de vida de empleados lo que deriva en un mayor nivel de satisfacción y en un entorno de trabajo mucho más agradable.
- Espacios inteligentes: Una de las formas en que las organizaciones demuestran que se preocupan por sus integrantes, es a través de la provisión de servicios y comodidades en el lugar de trabajo. Los espacios más efectivos son aquellos que inspiran a las personas a rendir al máximo, apoyando sus necesidades cognitivas y estéticas.
Mejorar la experiencia de los empleados y su calidad de vida comienza con la convicción de que la estrategia de una organización debe basarse en una comprensión estrecha de su mayor activo: su gente.