Hay que practicar la bondad con nuestros semejantes

Consejos de una Bisabuelita Moderna / Por un México mejor

Los chicos de secundaria salieron a disfrutar sus vacaciones en la playa y después de observar a los vacacionistas comenzaron a trabajar a su modo:

Cuando vieron que un chico tiraba la basura a la arena y la tapaba, le comentaron que el basurero se encontraba muy cerca de donde estaba, que por favor cuidara a nuestra Madre Naturaleza por el bien de toda la humanidad, y si no les creía, sólo mirara algunos peces que yacían en la orilla, los cuales estaban condenados a morir…

También observaron a un grupo de jóvenes haciendo un gran escándalo porque una de su grupo se bebió casi sola una botella de tequila y comenzaba a bailar despojándose de su ropa…

La joven sin pelo y la hermosa chica, se acercaron a ella para impedir que siguiera con su baile, y en forma muy cariñosa platicaron con ella mientras que sus compañeros los distraían contándoles simpáticas aventuras; ellas se llevaron a la chica al baño para que se viera su triste aspecto en el espejo y espantada de sí misma reaccionó positivamente…

Vieron a un joven sospechoso que cuando una familia se fue a nadar, sacó la cartera del pantalón que estaba sobre una mesa, y de inmediato tres amigos lo detuvieron y le convencieron para que dejara ese mal hábito de robar a sus semejantes, y lo llevaron con el resto de amigos para que le regalaran la mitad de sus alimentos junto con unos platos, para que se pusiera a vender en lugar de robar, y… ¡Así lo hizo!, quedando profundamente agradecido con todos por esa gran lección, porque gracias a ellos, no fue a parar a la cárcel…

Al seguir su camino, todos olieron a petate quemado y… ¡Vieron que tres chicos detrás de una palapa, estaban fumando!… Al verlos, los tres chicos apagaron sus ̈churros ̈ y escondieron la hierba y unas pastillas, pero… ¡Era demasiado tarde porque los chicos los rodearon y se las quitaron, arrojándola al inodoro  del baño!… Se quedaron hablando con ellos sobre las terribles consecuencias de las drogas en esos maravillosos cuerpos humanos.

Entonces el joven sin pelo les habló de su enfermedad y de su gran sufrimiento, diciéndoles: “En ocasiones he luchado por una hora más de vida, y ustedes tan llenos de salud y energía, con esos cuerpos esculturales… ¡Drogándose de esa manera!, en una hora con drogas, o… pueden morir, o estar en la cárcel, o… ¡Se pueden quedar discapacitados para siempre!… Por favor se los suplico… ¡Traten de no volver a drogarse jamás!”

Las hermosas chicas con una ternura infinita les pidieron: ¡Por amor a sus seres queridos jamás lo vuelvan a hacer!… Los tres chicos asustados recapacitaron.

Todos continuaron su camino; cansados se sentaron a comer repartiendo entre todos lo que les había quedado pero felices disfrutaron hasta el último bocado…

Cuando terminaron de comer, el bromista dijo: ¡Verdaderamente no entiendo los modernismos!

Todos desconcertados preguntaron: ¿Qué estás diciendo?…

El bromista dijo: Es que cuando comíamos, se me atoró un pedazo de alimento entre los dientes y como no traje mi hilo dental que está en una cajita chiquita, me molesta mucho mi encía, por eso creo que le voy a pedir prestado su traje de baño a esa dama…

Todos: ¿Pedirle prestado su traje de baño?

El bromista: ¡Claro que sí!, Observen la parte de atrás, trae un hilito más delgadito que mi hilo dental… Si lo paso por mis dientes… ¡Nada me molestará!

Todos rieron.

Para mis hermosos Ángeles Terrenales del ¨Grupo Canica¨.

                                                                                                                 Cariñosamente Su Bisabuelita Ana I.