Elaborando popotes naturalmente

El Jardín Botánico de Vallarta ahora ofrece una solución natural y renovable: cortes del nativo bambú Rhipidocladum racemiflorum

Por: Neil Gerlowski, Director Ejecutivo, Jardín Botánico de Vallarta

Actualmente existe un movimiento a nivel mundial para disminuir el consumo excesivo de plástico, y por una buena razón: estamos contaminando nuestro planeta con esta sustancia sintética. Bolsas de plástico y botellas de agua desechables han sido el principal objetivo por años debido a la enorme cantidad de ellas que terminan en vertederos, ríos y océanos. Los popotes de plástico de un solo uso están entre los últimos artículos bajo la mira para eliminarlos como pequeños elementos “innecesarios” que aportan a acrecentar el problema, ahora de proporciones épicas. Desde la Unión Europea, hasta California en los EEUU, los legisladores progresistas y los empresarios hacen su parte para acabar con el uso de popotes plásticos.

Pero, ¿qué significa para turistas en destinos tropicales tan famosos como nuestro querido Puerto Vallarta? ¡Seguramente no consideraríamos omitir los coloridos popotes que unen deliciosos trozos de fruta y flores vibrantes que adornan los vasos de tus margaritas y mojitos! El Jardín Botánico de Vallarta ahora ofrece una solución natural y renovable: cortes del nativo bambú Rhipidocladum racemiflorum. Sus segmentos rectos y huecos tienen una proporción casi perfecta para beber y verse bien en tu cóctel tropical favorito. Conocido localmente como “carricillo” (nombre común que también se aplica a Chusquea liebmannii y otros bambúes nativos locales) tiene incluso apodos más armoniosos en Veracruz, el límite oriental de su rango de distribución, donde se le conoce como “chiquián” o “chiquilla”, términos afectivos que encontramos bastante apropiados.

Estos accesorios de bebidas amigables con el ambiente se cultivan en el Jardín Botánico de Vallarta y son cosechados sustentablemente para asegurar un suministro constante para el futuro. Mientras que mucha gente está acostumbrada a tirar su popote después de un solo uso, tu puedes incrementar fácilmente su tiempo de vida útil si los enjuagas y los dejas secar totalmente entre uso. Los expertos en bambú que recientemente visitaron el Jardín Botánico de Vallarta, Dany Ramos (Zoológico de San Diego) y el Dr. Eduardo Ruiz-Sánchez (Universidad de Guadalajara) aseguran la duración de estos popotes naturales por años si se secan completamente y tratan usando aceites o ceras naturales como aceite de nim o cera de abejas. Nos dieron también consejos para la reproducción de esta planta por medio de los rizomas (tallos subterráneos especializados) y comentan que pronto tendremos la oportunidad de propagar esta planta en grandes cantidades cuando entre en floración. Este bambú en particular solo florece una vez en aproximadamente seis años, y el Dr. Ruiz nos dijo que definitivamente no ha florecido en los últimos cuatro. Así que, algún día, tendremos más semillas de “chiquián” de las que podemos sacudir en una vara de bambú, millones de ellas literalmente. Esa es una forma modesta de comenzar a cambiar el rumbo de un problema ambiental al que nosotros, como sociedad, hemos contribuido durante demasiado tiempo. Así que ayúdanos a hacer la diferencia: ¿de qué otra manera puedes ser ecológico?

Fotos de Rhipidocladum racemiflorum Por Leo Campos, Biólogo, Jardín Botánico de Vallarta