El valor de adoptar prácticas inclusivas con personas neurodivergentes

Empresa Farmiliar / Por: C.P.C. y M.I. José Mario Rizo Rivas

Tomar en cuenta la neurodiversidad es un gran reto, y un primer paso es comprender lo que una condición de ese tipo implica.

Las personas neurodivergentes han sido históricamente invisibilizadas. El método de las cucharas puede ayudarnos a hacerlos parte de la inclusión en la empresa familiar.

“La neurodiversidad es un regalo que nos desafía a pensar más allá de las etiquetas y celebrar las diferentes formas de brillar”. Yvonne Pierre

En el trabajo con los colaboradores de una empresa, un líder sabe reconocer que cada uno tiene características distintas y debe aprovechar de la mejor manera esas individualidades. Un gran pendiente en este trabajo de inclusión es el tomar en cuenta a las personas neurodivergentes o con neurodiversidad, quienes tienen distintas maneras de aprender, concentrarse, socializar, entre otros aspectos cognitivos. La neurodivergencia es un término que se utiliza para describir las variaciones en el funcionamiento del cerebro humano, que incluyen condiciones como el autismo, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), la dislexia, y otras diferencias neurológicas. Comparto la siguiente fábula oriental que nos ayudará a acercarnos a esta situación.

Érase una vez un hombre que, caminando por el bosque, escuchó el llanto de un niño. Preocupado, buscó de dónde venía aquello y se encontró con otro hombre, a la orilla de un río, intentando lanzar al agua a un niño. El caminante dijo: “Ten cuidado, el niño está asustado”. El otro hombre contestó: “No entiendo por qué llora, yo soy su padre y soy un gran nadador, él debe estar listo para lanzarse al río”. El caminante no pudo sino sorprenderse ante tal disparate.

Creer que todas las personas tienen las mismas capacidades que nosotros sería tan irracional como lo que presenta la fábula. Tomar en cuenta la neurodiversidad es un gran reto, y un primer paso es comprender lo que una condición de ese tipo implica. Quiero presentar el método de las cucharas, el cual puede enriquecer la inclusión de tu empresa familiar.

  • La vida cotidiana no es igual para todos. Las personas neurodivergentes viven cada día con una patología crónica que las personas a su alrededor raramente notan y menos comprenden. El método de las cucharas ilustra lo que viven: se trata de entender que estas personas tienen dosis limitadas de energía, y actividades que podrían parecer muy sencillas implican para ellos gastar sus cucharas de energía y no poder continuar con sus actividades diarias. Una organización respetuosa e inclusiva debe buscar tener un panorama bien claro de las condiciones de sus colaboradores, sin etiquetas ni prejuicios, sino para tratar de ayudarlos a que tengan una vida digna y esto comience con el respeto que reciben en su lugar de trabajo.
  • Construyendo una cultura del respeto. Una empresa inclusiva debe ocuparse de la capacitación de todos sus colaboradores para entender que no todos tenemos las mismas cucharas en nuestro desempeño diario. Racionar las cargas de trabajo, establecer comunicación clara y asertiva con las personas con estas afectaciones, son iniciativas que crearán las bases para alcanzar la equidad laboral. Las personas con este tipo de discapacidad gastan parte de su energía tratando de “ocultar” sus problemáticas: ayudémoslos empezando por aceptarlos y haciéndoles saber que tratamos de comprenderlos.
  • El poder de la inclusión. Las organizaciones que promuevan el respeto sabrán aprovechar las fortalezas de las personas neurodivergentes, las cuales muchas veces son puestas de lado ante los prejuicios: la alta capacidad de concentración de una persona autista, la innovación y energía de un colaborador con TDAH, la mentalidad curiosa que en general quienes viven la neurodiversidad. De acuerdo con una importante investigación, brindar las condiciones adecuadas mejorará en un 60 % las afectaciones de sus colaboradores. Asimismo, una organización responsable evitará ser parte de las empresas que, de acuerdo con estadísticas, pierden 66 millones de pesos por ausentismo y 117 millones por rotación de personal.

Alejémonos de los prejuicios y la discriminación. Las empresas familiares pueden mejorar su entorno haciendo visible esta temática y mostrando respeto por todos los tipos de colaboradores con los que cuentan. La neurodivergencia abarca una variedad de condiciones que afectan el funcionamiento cognitivo, ofreciendo perspectivas únicas y habilidades valiosas.

Incluir y apoyar a las personas neurodivergentes en una empresa familiar no solo es una cuestión de responsabilidad social, sino que también puede aportar grandes beneficios en términos de innovación, creatividad y productividad. Al comprender y aplicar el método de las cucharas y otras estrategias de apoyo, las empresas pueden crear un ambiente de trabajo donde todos los empleados tengan la oportunidad de prosperar.