El protocolo como estrategia en las Relaciones Públicas
Cualidades Exquisitas / Melissa López
Existe un sinfín de creencias con relación al protocolo, entre ellas: que es algo anticuado, que siempre es muy estricto, que solo aplica en ceremoniales o asuntos diplomáticos, etc. La realidad es que, el protocolo está más vigente que nunca y se adapta a los nuevos tiempos; incluso en casa aplicamos protocolo sin darnos cuenta al momento de sentarse en las cabeceras los anfitriones en una mesa rectangular, justo ahí se está aplicando protocolo, ceder el mejor lugar a los padres o abuelos por respeto a su edad, eso es protocolo porque se considera y aprecia la jerarquía.
Bienvenidos nuevamente a “Cualidades Exquisitas” un espacio donde aprenderás por qué cuidar nuestra imagen es fundamental.
El protocolo es una herramienta de comunicación silenciosa que al hacer uso de ella dentro de las Relaciones Públicas se convertirá en la mejor estrategia.
El ser humano es un ser sociable por naturaleza, siendo lo ideal el aplicar ciertas normas de cortesía para poder interactuar sobre todo cuando estamos en entornos laborales; no solo de manera interna en la compañía, sino incluso el rol que desempeña la empresa o el profesional dentro del país o fuera de él.
El protocolo se efectúa según el objetivo, el entorno y lo que se quiere proyectar; porque es una herramienta de comunicación silenciosa que dice todo. Por tal razón, es fundamental tener muy claro qué se quiere comunicar para establecer una estrategia y lograr así unas excelentes Relaciones Públicas; se trata de cuidar cada detalle del evento, de la reunión de trabajo, de los viajes de negocios.
El protocolo es una disciplina que permite crear un puente para lograr una mejor comunicación, convivencia, establece normas, decretos, reglas de cortesía; ayuda con la planeación, desarrollo y ejecución de cualquier evento: diplomático, internacional, empresarial, gubernamental, académico, deportivo, etc.
Cada evento según su giro es único: los juegos olímpicos, ceremonia de cartas credenciales, aniversario de la empresa, etc. Sin embargo, siempre vemos elementos importantes de protocolo como son:
Presendencia: La persona más importante según el contexto.
Precedencia: El acomodo por prioridad de las personas o banderas, para proyectar jerarquías o distintos mensajes según el objetivo, siguiendo los distintos criterios como puede ser: alternancia, antigüedad, alfabeto, por ley, etc.
Ley de la derecha: De la presedencia es el segundo lugar más importante.
Símbolos patrios: Banderas, Himnos, Escudos
Anfitrión: Persona que organiza e invita para agasajar a sus invitados con generosidad.
Invitado: Persona que recibe una invitación para presentarse en un evento o acto.
Invitado especial: Persona a quien a veces se le sede la presedencia por cortesía o a quien se le realiza el homenaje; su presencia eleva el evento.
El protocolo engloba y propicia ese ambiente en el cual se cuida hasta el más mínimo detalle de comunicación e imagen, sobre todo, cuando existen diferencias culturales en dónde a través del respeto regulado por ley, sobre el uso de los símbolos patrios, así como los usos y costumbres aplicados con toda la hospitalidad se logra la armonía no solo de un evento, gracias a la imagen y el protocolo, la empresa se ve beneficiada con una excelente reputación y alianzas comerciales, porque se considera toda una atmósfera: desde los vehículos, comidas de negocios, avión, reuniones en donde por estrategia se opta por una Precedencia Estilo Inglés o Precendencia Francesa donde se sientan al centro, porque el objetivo es conseguir mayor cercanía y así lograr una mejor comunicación.
Por todo lo antes dicho y con la globalización de las empresas, se aconseja considerar dentro de su organigrama el departamento de Imagen y Protocolo como parte fundamental de apoyo del equipo de Relaciones Públicas.
Te espero en el siguiente tema de “Cualidades Exquisitas”, sonríe.