Creando tu propio mapa
Despierta Vallarta
La gente exitosa está consciente del gran poder de las palabras, y lo utilizan para levantar a otros, hablan la verdad y reafirman a otros su valor. Comprenden que como les hablamos a otros, determina la calidad de sus relaciones personales.
“El mapa no es el territorio”
La Programación Neurolingüística (PNL) se refiere al mapa como interpretación del territorio, no el territorio mismo, en el mismo sentido que le damos significado a nuestras experiencias de manera inconsciente a través de filtros que formamos con nuestros 5 sentidos y las palabras que utilizamos, por lo tanto, estas experiencias o interpretación del mapa pueden estar distorsionados y no servirnos en nuestro desarrollo personal y comunicación con otros.
La finalidad de estudiar y utilizar técnicas de PNL, es tener el control absoluto del ‘mapa’ que estamos creando de nuestra vida.
Una de los fundamentos más importante es analizar cuáles son nuestras creencias y valores individuales y colectivos, y de qué manera afectan nuestras relaciones personales, y así aprender a modificarlas por creencias que nos empoderen para que este ‘mapa’ sea realmente el que conscientemente queremos crear.
Personalmente, el PODER de manejar un lenguaje que sirviera como la mejor interpretación a mis experiencias, significó comprender que nuestras palabras pueden:
*INSTRUIR
*DESTRUIR
*CONSTRUIR
Ya sea nuestra propia realidad o relaciones personales y profesionales.
Don Miguel Ruíz nos habla en su libro “Los Cuatro Acuerdos”, de hablar con impecabilidad, que significa hablar desde nuestra mejor versión de nosotros mismos, hablar con intención e integridad, que nuestras palabras están en sintonía con lo que queremos crear, nuestra visión y nuestros sueños.
La gente exitosa está consciente de este gran poder, y lo utilizan para levantar a otros, hablan la verdad y reafirman a otros su valor. Comprenden que como les hablamos a otros, determina la calidad de sus relaciones personales.
Aunque la mayoría de nosotros pueda no ser consciente aún, podemos empezar a crear esta conciencia al poner en práctica nuevos hábitos al hablar, por ejemplo, ser inclusivo y no utilizar palabras de separación, palabras de aceptación en vez de rechazo, de tolerancia en vez de prejuicio.
Inténtalo y verás el efecto dominó que tiene en los que te rodean y cómo mejora tu comunicación con otros.
Tienes el poder, ¡usalo!
Adriana Méndez Snowden
Coach de Vida, Conferencista Internacional y Escritora
Escríbeme a contact@adrianamendezsnowden.com