¿Cómo sobrevivir a un momento acidito?
Alguna vez te ha pasado algo por lo que sentiste mucha pena o querías que la tierra te tragara, pero que hoy se ha convertido en la anécdota más divertida, que incluso la compartes con tus amigos? Si tu respuesta fue sí, entonces has vivido un “momento acidito”.
Hoy queremos compartir contigo 5 tips para sobrevivir a estos momentos, sin morir en el intento y aprender a disfrutarlos:
Se vale equivocarse
¿Te acuerdas cuando creíste estar solo en el pasillo de la escuela con tus amigos, les confesaste tu amor por tu crush y en eso te diste cuenta de que iba pasando detrás de ti y te escuchó? No te preocupes por esto, la vida está hecha para atreverse y vivirla intensamente, no tengas temor a equivocarte.
Saborea el momento
Una sonrisa siempre será una excelente solución ante los #MomentosAcidtos, bien dicen las abuelitas que todo depende del cristal con que se mire, así como cuando te tropezaste en tu primera cita con tu date y tiraste todas las palomitas, al final quedó como algo divertido, que seguro contarás a tus amigos
La vida es acidita
Acéptalo, a todos nos ha pasado que las cosas no salen como lo teníamos planeado. Como cuando estabas en clase y pasó el de los colchones mientras prendías tu micrófono para participar, así que tranquilo, todos hemos pasado por ahí, recuerda que todo pasa y depende de ti disfrutar ese toque acidito que tiene la vida.
Momento acidito, momento de aprendizaje
Debes aprender a vivir y disfrutar cada uno de los momentos aciditos, ejemplo cuando te caíste en la fiesta enfrente de tu crush, pero bueno, ¡Al menos te vió! No importa qué tan incómodo pueda ser o cuánta pena puedas llegar a sentir, recuerda que para eso son, para aprender de ellos, reírnos y convertirlos en anécdotas que seguramente nos harán mejores personas. No olvides que de todo lo malo siempre habrá algo bueno.
No le sigas dando vuelta al asunto
Si ya pasaste por un momento acidito, no repases en tu mente todos los escenarios posibles de lo que debiste haber dicho o hecho diferente, por ejemplo; cuando le confesaste a tu mejor amigo que te gustaba su hermana y te dejó de hablar unos días. Debes de aprender de esta situación y encontrar el lado divertido.
¡Diviértete y pasa la página!