Abstinencia
Consejos de una abuelita moderna
Así como muchas palabras están siendo eliminadas de nuestro vocabulario y substituidas por otras más “globalizadas”… Aunque usted no lo crea, eso está provocando una gran confusión entre los niños y jóvenes, orillándoles a vivir en extremos innecesarios, provocándoles un futuro lleno de inquietudes y dudas, entre los cuales hemos visto los tristes desenlaces que han obtenido, por ejemplo: Cuando en lugar de vivir libremente… ¡Lo han hecho con un libertinaje desmedido!
Muchos padres irresponsables, pretextando que tienen que trabajar para dar lo “mejor a sus hijos”, olvidan que lo mejor para ellos es: La buena convivencia, la atención necesaria, mucha paciencia y grandes dosis de amor; porque, cuando obtengan los recursos económicos deseados para sus hijos, éstos ¡ya han abandonado su nido y los habrán perdido!…
Cuando han permitido que los eduquen en las escuelas, parecen haber olvidado que el Centro “Educativo”, sólo es para impartir conocimientos, ya que es sabido que la buena educación, las bases y principios religiosos, éticos, cívicos y humanos que se necesitan para poder triunfar y ser feliz en la vida… ¡se reciben en el hogar y con el buen ejemplo que les dan sus padres!, y nunca en forma grupal se debe enseñar ese tema tan delicado pero importantísimo para el desarrollo de un futuro sano y responsable; sin tomar en cuenta, sobre todo en el aspecto sexual: El carácter, la dignidad y el modo de vida que cada familia profesa; ya que todos son seres únicos e irrepetibles, y no todos tienen esa madurez ni física, ni intelectual como para llegar a comprender de la misma forma su sexualidad.
En lugar de repartir condones y anticonceptivos a esos “adultos menores”, que en realidad a esa edad no tienen ni la menor idea de lo que representa el inicio a esa nueva forma de vida sexual, ¿por qué no enseñarles sobre los beneficios de la abstinencia e higiene física y mental correspondiente?
Unos buenos padres saben que la práctica de la abstinencia en sus hijos es muy importante para la vida del ser humano; ya que así aprenden las grandes ventajas y beneficios que con ella se adquieren: respeto, verdadera libertad, vida armoniosa, feliz y tranquila para con ellos mismos y sus semejantes, que los llevará al éxito; ya que de esa forma evitarán: malas notas escolares, muchos dolores de cabeza, algunas enfermedades tanto físicas como psíquicas, bebés no deseados, alcoholismo, drogadicción, despidos escolares o laborales, etcétera…
Cuando se actúa en forma libertina y sin el control paterno ni médico, con tal de no verse rechazados por sus mismos “amigos”… En cuanto comienzan a tener problemas (algo muy común en la juventud: embarazos no deseados, enfermedades venéreas o adicciones), sus supuestos amigos se esfuman, quedando esas divinas criaturas completamente solas y desamparadas, ¡a merced de esos “lobos al acecho”!
Recuerden que en ésta enigmática vida no existe ni la buena ni la mala suerte, sino que uno mismo con su forma de ser y proceder, se la labra. No tienen idea de cuántas niñas con bebés, o que tuvieron abortos, o niños y jóvenes con enfermedades incurables, o criaturas adictas rechazadas por la misma sociedad, ¡desearían volver a vivir para poder practicar con orgullo la abstinencia!
¿Cuántas vidas con un maravilloso futuro por delante?, ¿cuántos ángeles terrenales con una infancia envidiable han sido confundidos, destrozados o vejados con tanta información no solicitada?; y eso se podría evitar ¡sólo con la sencilla práctica de la abstinencia!
Por eso vuelvo a suplicar encarecidamente… ¡Cuidemos y enseñemos con mucha paciencia y amor la práctica de la abstinencia!, para lograr una mejor Patria, en un ambiente de respeto, paz y libertad.
Cariñosamente Ana I.