Quistes en los riñones
Vanefropedia
Dra. Vanessa A. Parra Estrada
Nefróloga Pediatra
Un quiste renal es una bolsa llena de líquido (generalmente orina) que se forma sobre o dentro de la superficie de los riñones, este puede ser único y no generar ningún problema o múltiples y parte de una enfermedad renal grave y potencialmente mortal.
La mayoría de las enfermedades que involucran quistes son hereditarias y algunas están asociadas a enfermedades en otros órganos como hígado, corazón y cerebro, además quistes pueden estar acompañados de quistes en otras zonas como en páncreas, hígado, ovarios, etc.
La más común es la Enfermedad Poliquística Renal y existen 2 tipos de herencia genética: Dominante y Recesiva (EPR-AD, EPR-AR), lo cual determina la probabilidad de heredarlo.
La Enfermedad Poliquística Renal Autosómica Dominante (EPRAD) es una de las enfermedades genéticas más comunes y es la enfermedad renal genética más común en el mundo. Generalmente, se detecta en hombres y mujeres entre los 30-40 años, sin síntomas y como hallazgo al hacerse un ultrasonido abdominal o tomografía por otra razón, sin necesariamente buscarlo.
Cuando producen síntomas, los más comunes son:
- Infecciones urinarias
- Dolor abdominal
- Masa abdominal
- Sangre o proteínas en la orina
- Hipertensión arterial
Aunque sus manifestaciones clínicas suelen ser leves en pacientes pediátricos, se recomienda que todas las niñas y niños con historia familiar sean valorados desde edades tempranas.
La Enfermedad Poliquística Renal Autosómica Recesiva (EPRAR), es la más rara pero la más severa, por su edad de presentación temprana (menores de 1 año e incluso neonatal). Esta enfermedad no solo involucra quistes y daño renal, si no también daño hepático, requiriendo trasplante renal y de hígado en las primeras etapas de la vida. Más del 60% de los niños y adultos con esta enfermedad hereditaria tendrán Enfermedad Renal Crónica y ameritarán diálisis.
Lo que hace a los quistes renales, peligrosos para la vida, es que crezcan o vayan apareciendo incontables quistes que invaden y sustituyen las células renales, provocando infecciones, abscesos, ruptura o pérdida de la función de los riñones.
Al momento, no se dispone de tratamiento específico para ambas enfermedades, el tratamiento general para adultos y niños se centra en identificar y minimizar las complicaciones renales y extra renales.
Es importante que todas las personas con historia familiar de quistes renales sean valorados por nefrólogos y nefrólogos pediatras, para detectar los primeros signos y síntomas, valoración de la función renal oportuna y brindar la atención adecuada a los adultos y niños afectados.
Recuerda que riñones sanos, ¡niñ@s felices :)!