Cáncer de pulmón, conoce cómo prevenirlo
Por el Dr. Tobias Peikert,
Neumología y Cuidados Intensivos de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota
Es raro que el cáncer de pulmón muestre síntomas antes de llegar a etapas avanzadas. La mayoría de los casos de cáncer de pulmón en etapa temprana se detectan por casualidad en personas que no muestran síntomas y se someten a un estudio por imágenes debido a otras razones. Aunque abstenerse de fumar o dejar de hacerlo son todavía las formas más eficaces de evitar el cáncer de pulmón, también se pueden tomar otras medidas que contribuyen a la salud pulmonar a largo plazo.
El cáncer de pulmón continúa siendo la causa principal de muerte por cáncer en Estados Unidos, tanto entre hombres como mujeres. Los síntomas clásicos suelen aparecer solo cuando la enfermedad ha avanzado e incluyen tos constante, falta de aire, dolor del pecho, tos con sangre y ronquera.
El hábito de fumar es, en gran medida, la causa más común para el cáncer de pulmón y hasta el 85% de los casos está compuesto por fumadores. El riesgo para cáncer pulmonar entre los fumadores aumenta según la cantidad diaria que fuma la persona y los años de duración.
Las personas no fumadoras que podrían correr más riesgo de cáncer de pulmón son, entre otras, quienes tienen exposición prolongada al humo de segunda mano (fumadores pasivos), exposición larga al gas radón, exposición laboral al asbesto y otras sustancias conocidas por producir cáncer, así como la gente con antecedentes familiares de cáncer pulmonar.
La mejor manera de evitar el cáncer de pulmón es no fumar y dejar el hábito a cualquier edad reduce significativamente el riesgo. Los fumadores asiduos que aún siguen fumando y los exfumadores también pueden beneficiarse de los programas para detección del cáncer pulmonar recién establecidos.
Los exámenes permiten detectar el cáncer de pulmón en personas con alto riesgo de sufrir esta enfermedad antes de que aparezcan síntomas, e implican exámenes por imágenes, conocidos como tomografías computarizadas de los pulmones con baja dosis de radiación, que buscan signos de cáncer, concretamente nódulos pulmonares. Cuando se descubre un cáncer en las primeras etapas, es más probable tratarlo con éxito. Los exámenes para detección del cáncer de pulmón han demostrado salvar vidas, igual que las detecciones para cáncer de mama y de colon mediante mamografías y colonoscopias, respectivamente.
Recomendaciones
En general, se recomienda hacer exámenes de detección en las personas de 55 a 80 años con un índice de paquete año de 30 o más. El índice de paquete año se calcula multiplicando la cantidad de paquetes diarios de cigarrillos por el número de años que la persona fumó. Los exámenes de detección igualmente serían convenientes para otras personas con más riesgo de cáncer pulmonar. Si según sus antecedentes médicos, familiares o de exposición a sustancias que producen cáncer usted cree que está dentro de alguna de estas categorías, hable con su proveedor de atención médica acerca de los exámenes de detección. Un estudio realizado a nivel nacional en el año 2011 descubrió que la detección anual del cáncer de pulmón en las personas con alto riesgo redujo significativamente las muertes relacionadas con ese tipo de cáncer en esa población.
Aparte del hábito de fumar, tomar medidas para reducir la exposición al radón también puede disminuir el riesgo de cáncer pulmonar. El radón es producto de la descomposición natural del uranio en la tierra, las rocas y el agua. Si vive en una zona donde el radón es común, solicite que se hagan pruebas en su casa. Para información acerca de las pruebas para el radón, comuníquese con el departamento de salud pública de su localidad.
Si su trabajo implica exponerse a sustancias tóxicas, tome medidas para protegerse y cumpla con las precauciones de su empleador. Por ejemplo, si le entregan una mascarilla para protección, úsela siempre.
Por último, un estilo de vida sano y activo, que incluya hacer ejercicio de forma regular y tener una alimentación rica en frutas y verduras, puede favorecer al sistema inmunitario y reducir el riesgo para muchos tipos de cáncer, incluido el de pulmón.
Si le preocupa padecer cáncer del pulmón, hable con su proveedor de atención médica. Esa persona puede evaluar su riesgo general y ayudarlo a determinar qué medidas podría tomar para reducirlo.