El amor propio genera el mejor cambio de imagen
Cualidades Exquisitas / Melissa López / Consultora de Imagen
“La belleza comienza con la decisión de ser uno mismo”. Coco Chanel.
Se dice que lo más difícil para las personas a veces es aceptarse físicamente tal como son; sin embargo, ese es el verdadero secreto para lograr el mejor cambio de imagen: la aceptación a través del amor propio.
Bienvenidos nuevamente a “Cualidades Exquisitas”, un espacio donde aprenderás por qué cuidar nuestra imagen es fundamental.
Siempre he compartido con mis clientes y a través de mis redes sociales, los beneficios que una persona obtiene al acercarse a un consultor de imagen y vivir la experiencia de una asesoría personalizada. En esta, puedes conocerte realmente y saber qué colores o prendas te favorecen. Es verdad que vestir ciertos tonos o usar determinada ropa otorga seguridad, y adquirir conocimientos de comportamiento en la mesa también genera confianza en cualquier ámbito, ya sea personal o profesional. Sin embargo, yo no tengo una varita mágica para generar un cambio de imagen, porque este debe hacerse desde adentro, especialmente cuando está relacionado con el tema de la aceptación.
¿Quién te enseña a vestir? ¿Quién te dice realmente qué te favorece? La moda, los cánones de belleza que vemos en las revistas, y ahora el bombardeo constante de imágenes a través de las redes sociales, muestran cuerpos “perfectos” con una apariencia increíble, lo que muchas veces provoca que las personas con baja autoestima no se sientan bien consigo mismas debido a la constante comparación.
La autoimagen se forma desde la infancia. Palabras o apodos como “muestras de cariño” que usan los padres o hermanos son etiquetas que la persona asume como parte de su identidad, y que incluso puede seguir creyendo en su vida adulta. Por ejemplo: “el cachetón de la familia”, “el chaparrito”, “la flaquita”, “el orejón”, etc.
Hoy en día no existe una silueta “ideal”, como se creía del reloj de arena, que supuestamente equilibra hombros, cintura y cadera. Lo ideal es observar qué te hace lucir bien y empoderarte aceptándote primero tal y como eres. Tener un espejo de cuerpo completo es básico, para observar tu cuerpo desde todos los ángulos y entender el efecto visual que provoca la ropa. ¿Sabías que un estampado geométrico y de alto contraste en color puede aumentar visualmente hasta 5 kilos? Si eres una persona robusta, quizá esto no te favorezca tanto.
Los consultores de imagen asesoramos la apariencia externa, pero la tendencia es guiar hacia una sesión más integral, trabajando también en la imagen interna: autoimagen, autoconocimiento, autoestima, donde la aceptación de quién eres comienza en ti.
A través del amor propio, es importante ser consciente de tu diálogo interno, aceptar tu cuerpo tal como es, y está bien usar ciertos trucos de ilusión óptica a través de la vestimenta para lucir mejor.
Reflexiona antes de someterte a una cirugía estética, ya que en ocasiones estos procedimientos solo terminan dañando el cuerpo y alterando por completo la imagen o expresión facial. Al final, ¿cuál es el resultado? Lamentablemente, la no aceptación continúa, ya que se sigue buscando algún defecto físico. En algunos casos más severos, como la dismorfia corporal, es necesario acudir a un psicólogo.
La aceptación de quién eres empieza con tus palabras. Deja de llamarte tonta, gorda o fea; deja de usar adjetivos peyorativos. No se trata de ego, sino de amor propio. Expresarte cada día afecto, aceptación y aprecio hacia ti misma es lo mejor que puedes hacer para lograr un cambio de imagen. Lo más importante es reconocer cómo es tu cuerpo, abrazarlo y aceptarlo tal cual es. Te espero en el próximo tema de “Cualidades Exquisitas”. ¡Sonríe!