La avena

La avena contiene vitaminas, minerales, nutrientes y fibra dietética, es fuente de hidratos de carbono. Es uno de los cereales que se ha convertido como base de la alimentación por su especial cualidad nutritiva y energética, siendo muy beneficiosa para la salud cardíaca, ayuda a disminuir los niveles de colesterol y azúcar en la sangre.

Aporta energía B6, Vitamina E y B5, hierro, selenio, cobre, zinc, y aminoácidos esenciales, también contiene manganeso que sirve para la inmunidad, coagulación sanguínea y la forma en que se metaboliza el colesterol y el azúcar en la sangre.

Lo más interesante de la avena es que cuando se mezcla con el agua caliente y espesa, eso viscoso que se forma es el betaglucano y contribuye a que se sienta saciedad y ayuda a que la comida no digerida descienda a las partes del tracto digestivo, donde alimenta a las bacterias beneficiosas que allí viven.

También es rica en fitonutrientes, como las avenantramidas que tienen efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Las hojuelas de avena se etiquetan como “cortadas al acero” lo que significa que fueron procesadas den un cortador de acero. Las hojuelas de avena arrolladas primero se cuecen al vapor y luego se presionan con un rodillo, “si el rodillo aplasta la avena para formar hojuelas más delgadas, entonces obtienes la avena de cocción rápida”, “si luego se arrollan en hojuelas más delgadas se obtiene la avena instantánea”.

Se dice que hay poca diferencia entre las hojuelas de avena cortadas al acero o arrolladas, solo que la avena instantánea tiene un índice glicémico más alto lo que significa que elevará más rápidamente el azúcar en la sangre.

La avena beneficia a las personas con diabetes, evita el estreñimiento, contiene proteínas, previene el riesgo de cáncer, el hipotiroidismo, es prebiótica, alimenta los tejidos del organismo y aporta gran saciedad. Se recomienda comerla en el desayuno acompañada con fruta y miel.

Olivia Segura Health Coach
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