Motivación adolescente

Yo los invito a que se tomen un momento al día y volteen a ver lo bueno que la vida les ha dado, y que agradezcan por estar aquí

Por: Nestor Cabral Biurcos

“Hasta que no te valores a ti mismo no valoraras tu tiempo.
Y hasta que no valores tu tiempo no harás nada con él”.
 –M. Scott Peck.

La motivación, un concepto que todos conocemos, pero pocos entendemos y explotamos a nuestra máxima capacidad. Parece fácil entender qué es la motivación si simplemente nos basamos en que es un estímulo que nos ínsita a hacer una acción o creer de cierta manera, mas yo pienso que esto puede ser algo más que eso.

Durante la adolescencia nos empezamos a dar cuenta de distintas cosas. Lo queremos, lo que creemos que queremos, lo que nos motiva a alcanzar lo que queremos, y lo que creemos que nos motiva a alcanzar lo que queremos. En Puerto Vallarta viven miles de jóvenes con diferentes motivaciones, creo yo el problema es que existen de estas, dos tipos. Si la pregunta fuera dirigida hacia mí, yo diría que no hay un solo tipo de ánimos que podemos tener.

Con esto me refiero a que habrá cosas que nos motiven que puedan no ser las correctas, o las que deberíamos estar buscando ya que perjudican a que nuestra comunidad crezca. Tales como la motivación de obtener ganancias financieras rápidas y que, por lo tanto, los jóvenes se involucren en actos ilícitos como el robo, el tráfico de substancia, las extorsiones por el hecho de pensar que la manera de ganar dinero rápidamente sea esta.

No estoy queriendo decir que este sea el caso de todo joven en Puerto Vallarta, pero sí creo que es una realidad de la cual, sino es hablada, la posibilidad de que se reduzca o desaparezca como es lo esperado. Si nos vamos a ejemplos menos radicales podemos ver cómo en esta etapa de joven adultez, a veces queremos encajar en cierto grupo social, nos vemos “obligados” a cambiar quién somos o nuestra forma de pensar. Estos son ejemplos de motivaciones negativas.

Si a esto le damos un giro de ciento ochenta grados, nos encontramos con las motivaciones que pienso todo el mundo debería tener. Para empezar, tenemos que estar satisfechos con quien cada uno es, aceptar a tu persona y aprovecharnos de nosotros mismos. Si una persona se empieza a amar a sí mismo, por consiguiente, empezará a relacionarse de mejor manera con quien nos rodea.

Una vez que aceptes quién eres, podrás encontrar a tu alrededor verdaderas motivaciones que nunca han hecho falta en tu vida, simplemente no todos podemos encontrarlas a tiempo. Como adolescente es difícil pensar que la motivación pueda venir de adentro de nosotros y no de aspectos exteriores, ya que lo que una persona busca en esta etapa de la vida es la aceptación, y el error que cometemos es buscar la aceptación de los demás antes que encontremos la de nosotros mismos.

Una vez encontrada esa felicidad y reconocimiento en nosotros mismos, podemos ver que las cosas buenas en nuestra vida siempre han estado ahí, ocultas, pero constantes. La familia que tenemos, los amigos, los mejores amigos, los noviazgos, el deporte, la educación, mis sueños y metas.

Pero, ¿y para qué un adolescente necesita estar motivado? Alguien motivado, es alguien feliz, que rinde y que hace lo mejor de sí mismo, una persona motivada es aquella que contribuye a su entorno. Tener un propósito es importante, una manera de conocerlo es primero encontrar lo que te gusta y explotarla al límite de tu potencial. Existen maneras de valorar lo que tenemos y lo que en realidad nos debería motivar.

Yo los invito a que se tomen un momento al día y volteen a ver lo bueno que la vida les ha dado, y que agradezcan por estar aquí, todos estamos aquí para hacer de nuestra comunidad un mejor lugar, y si todos empezamos a pensar de esta manera, entonces las cosas serán diferentes.

La motivación es algo más grande que ámbitos materiales, la motivación se encuentra dentro nosotros y ya la tenemos, solo hace falta encontrarla. ¡Que tengan un excelente día!